Ayer, para El Excélsior, escribimos un análisis sobre las consecuencias e impactos que podríamos ver hoy en los mercados derivado de la crisis ucraniana. Allí hablábamos de los efectos de una guerra en Ucrania (que a nadie conviene). Aquí damos seguimiento a esa nota viendo lo que sucede en los mercados globales esta mañana.
Veamos: durante el fin de semana, Rusia recibió el permiso del parlamento para una intervención militar en toda Ucrania (no sólo en la estratégica región de Crimea). Y de momento, ya ha retomado el control del gobierno de Crimea y de instalaciones estratégicas como puertos, aeropuertos, carreteras, y estaciones de televisión. La respuesta internacional aún es tímida: en una conversación de 90 minutos, el presidente de EE.UU. Barack Obama, exigió a su homólogo ruso que desistiera de una intervención militar y “respete la independencia soberana e integración territorial de Ucrania” o, en caso contrario, sometería a Rusia a sanciones económicas y políticas, boicotearía la reunión del G-8 en junio en Sochi, e incluso expulsaría a Rusia de tal selecto grupo. Pero Putin poco caso ha hecho, de momento, a la amenaza estadounidense.
Tampoco ha habido una respuesta contundente de Europa, más allá de las declaraciones de los líderes políticos reprobando la invasión rusa. Hoy se reunirán los ministros de asuntos exteriores de la Unión Europea para dar una respuesta común, así como el Consejo de la OTAN.
Sin embargo, los acontecimientos del fin de semana ya se dejan sentir en los mercados globales. Estos son algunos riesgos, impactos desestabilizadores y reacciones a los eventos en Ucrania.
1. Primero, Ucrania corre riesgo de entrar en “suspensión de pagos”. El país está casi en bancarrota, y Rusia lo tiene a su merced. Por un lado, canceló un rescate financiero por un monto de 15,000 millones de dólares (mdd) que Yanukóvich y Putin firmaron en diciembre. Por otro lado, a Rusia le basta con elevar el precio del gas natural para incrementar el costo energético a niveles que no sean financieramente sostenibles, tal y como ayer amenazó el gigante ruso OAO GazProm. Ucrania tiene que refinanciar 13,000 mdd en deuda este año y el nuevo gobierno ucraniano ha solicitado 35,000 mdd de ayuda internacional para los dos próximos años para evitar la quiebra del país.
Esa posibilidad ha provocado un desplome de la moneda ucrania, la grivna, que en el año se ha hundido un 18%, y un fuerte repunte de los CDS a un año, o seguros contra el riesgo de impago. La Unión Europea, a su vez, negociaba con el nuevo gobierno un rescate hasta que la escalada bélica suspendió las negociaciones.
Hoy, los eurobonos con vencimiento en junio caen a 90.33 centavos de dólar, lo que lleva la tasa a un récord histórico de 51%. La tasa de los eurobonos con vencimiento en 2023 se eleva 1.12% a 10.62%. La bolsa de Ucrania se desploma un 11%.
2. La posibilidad de una “suspensión de pagos” en Ucrania afectaría, en primer lugar, a la propia Rusia: son los bancos rusos los que han venido financiando al gobierno ucraniano. Pero además las empresas rusas tienen muchos intereses en Ucrania, lo que se refleja hoy en su bolsa.
El índice Micex de Moscú se desploma esta mañana más de un 10%, el peor derrumbe desde noviembre de 2008. La minera Mechel se derrumba un 31%, la mayor aerolínea de Rusia, OAO Aeroflot, un 13%, el monopolio de gas OAO Gazprom un 12% y el mayor prestamistas OAO Sberbank un 15%.
3. La crisis ucraniana puede provocar disrupciones en el suministro de gas hacia Europa. Eso impactaría a los costos de la energía en Europa en un momento en que la región batalla por consolidar la recuperación económica. Pero también tendría efectos perversos sobre Rusia. La mitad de sus ingresos presupuestarios provienen de sus exportaciones energéticas, de gas y petróleo, y no puede permitirse una caída de sus recursos. Eso afecta al rublo: la divisa rusa, que se ha hundido más de un 8% en lo que llevamos de año, se despeña un 1.8% adicional para cotizar en 36.51 rublos por dólar. La rápida depreciación del rublo puede generar presiones inflacionarias, lo que provocó que el Banco Central de Rusia elevara hoy la tasa de referencia de 5.5% a 7.0%. La tasa de inflación en enero se ubicó en 6.1%, por encima del objetivo de 5% del banco central.
4. El riesgo de que el conflicto bélico desate una crisis energética también es patente. Los precios del gas natural trepan hoy en los mercados europeos. Los futuros del gas natural para entrega en un mes que se negocia en Londres trepa un 10%, el mayor incremento en un día desde septiembre de 2011. Los precios del gas natural en Holanda para entrega en abril de 2014 sube un 10%, en tanto el contrato alemán sube un 8.1%.
A su vez, los futuros del barril de Brent aumentan 3.0% a 112.34 dólares, los del WTI ascienden 2.3% a 104.92 dólares y en el mercado de EE.UU., los futuros del gas natural suben 2.1% a 4.71 dólares.
5. A Ucrania se le llama “el granero de Europa”, por lo que la ocupación rusa también amenaza el suministro de materias primas agrícolas, especialmente el trigo. Hoy los futuros del trigo se disparan 4.7%, en tanto el maíz aumenta un 2.6%.
6. La crisis ucraniana detona, además, una oleada de aversión al riesgo, con caídas en las bolsas globales y salidas de capitales en los países emergentes, sobre todo en los países de Europa del Este, los más próximos al conflicto. La bolsa de Hungría se despeña un 4.0%, la de Letonia un 4.5%, la de Polonia un 4.1%, y la de Rumanía un 3.2%.
En los países centrales, el Dax de Francfort se hunde un 2.8%, el Cac-40 de París un 2.3% y el Ibex-35 de Madrid más de un 2.0%. Los futuros de Wall Street, además, sugieren una apertura a la baja, aunque presumiblemente serán inferiores al 1.0%, en torno al 0.8%. Los futuros del S&P’s 500 pierden 14.5 pts, los del Nasdaq 100 casi 30 pts y los futuros del Dow Jones 115 pts.
7. Conforme los capitales huyen del riesgo, se refugian en los activos más seguros. Tal es el caso de los metales preciosos: los futuros de la onza de oro Troy suben 1.9% a 1,347 dólares, un máximo de 4 meses, en tanto los de la plata se incrementan 1.3% a 21.52 dólares. También los capitales se cobijan en los bonos del Tesoro de EE.UU.: la tasa de 10 años desciende 3 pbs a 2.61% esta mañana.