Escrito por: Dalia Toledo
Investigador Senior. Ethos Laboratorio de Políticas Públicas
Dada la necesidad de producir mejores resultados con los recursos públicos se han desarrollado mecanismos novedosos como los Bonos de Impacto Social (BIS). Los BIS son contratos a través de los cuales el sector privado invierte recursos en una intervención social novedosa o prometedora y el sector público reembolsa esta inversión al privado en caso de que el programa llegue a una meta previamente pactada.
A partir del primer BIS creado en 2010 para reducir la reinserción en la prisión de Peterborough, en el Reino Unido, los casos de BIS se han proliferado y abarcando un mayor número de asuntos públicos como empleo, salud o educación. En cuanto a seguridad pública y justicia, existen varias experiencias a nivel mundial; sin embargo, además del caso pionero, tres de los casos más documentados se encuentran en Estados Unidos.
Peterborough, Reino Unido
En Reino Unido, 60% de los adultos que cumplen sentencia cortas en prisión, reinciden durantes los 12 meses siguientes a su liberación. Ante este problema, el Ministerio de Justicia y el Big Lottery Fund accedieron a la creación de un BIS.
La implementación del BIS está a cargo de One Service, quien a través de 6 organizaciones sin fines de lucro, otorga apoyos para la vivienda y el empleo, tratamiento contra drogas y alcoholismo, así como apoyo emocional a 3,000 ex prisioneros de 18 años o más que hayan cumplido condenas menores a 1 año.
La inversión realizada por distintos entes privados fue de US $7.61 millones. En caso de que One Services logre reducir 10% de la reincidencia en cualquiera de los 3 grupos (de 1,000 ex prisioneros cada una) o el 7.5% de la reincidencia considerando el total de la población objetivo (3,000 ex prisioneros), el Ministerio de Justicia y el Big Lottery Fund deberán pagar la inversión realizada y un 13% adicional.
Una evaluación realizada por QinetiQ y la Universidad de Leicester encontró que el programa había logrado reducir la reincidencia en 8.4%. Sin embargo, el programa termina este año, por lo cual es posible que sea exitoso.
New York City, NY
En la Ciudad de Nueva York, 50% de jóvenes que sale de la penitenciaría de Rikers reingresa a la prisión en menos de un año y puede pasar al menos 200 días más en prisión en los siguientes 6 años. Dado el alto costo económico y social del encarcelamiento, se han probado mecanismos alternativos para reducir la reincidencia, como el Moral Reconation Therapy (MRT), que consiste en terapia psicológica y programas educativos individualizados.
Desde 2012, a través de un BIS, Osborne Association and Friends of Island Academy brindan MRT a 10,000 adolescentes prisioneros con el objetivo de evitar que vuelvan a cometer algún delito cuando abandonen la prisión.
Para realizar el proyecto se contó con una inversión inicial de US$ 9.6 millones, realizada por Goldman Sachs’ Urban Investment Group. Si Osborne Association and Friends of Island Academy logran reducir la reincidencia en 8.5%, el Departamento de Correcciones de la Ciudad de Nueva York deberá pagar US$ 9.6 millones (si se logra una reducción mayor, el retorno puede incrementar hasta US $11.71 millones).
El diseño del BIS contempla una garantía de inversión de US $7.2 millones financiada por Bloomberg Philanthropies. Es decir, en caso de no cumplirse con el objetivo, Bloomberg Philanthropies otorgará a Goldman Sachs´Urban Investment Group US $7.2 millones, con lo que éste sólo pierde el 25% de su inversión.
En agosto del 2015, el BIS fue cancelado porque no estaba produciendo los resultados deseados. Bajo esquemas tradicionales, el programa hubiera seguido siendo financiado, aún cuando no produjera los resultados esperados, lo que significa un uso ineficiente de los recursos públicos. Por ello, la cancelación de este BIS no debe verse como un fracaso, ya que permitió comprender qué modelos o enfoques no son los correctos si se quiere disminuir notablemente los niveles de reincidencia.
Rochester and New York City, NY
El gobierno del estado de Nueva York estima que del total de presos que son liberados cada año, 50% es de alto riesgo, ya que en los 5 años posteriores a su liberación tienen altas probabilidades de regresar a prisión y pasar ahí un año más. De acuerdo con estudios de la Division for Criminal Justice Services Analysis del estado de Nueva York, el alto costo de la reincidencia delictiva puede ser mitigado a través de programas que faciliten el empleo a reos recién liberados.
Así, en septiembre de 2013 se firmó el contrato para la creación de un BIS del cual se benefician 2,000 ex presos de 18 años o más con alto riesgo de reincidencia. La intervención, a cargo de Center for Employment Opportunities (CEO), busca que las personas liberadas puedan reinsertarse a la vida laboral, para lo cual se ofrece el desarrollo de habilidades para la vida, un empleo de temporal y servicios de colocación.
La inversión con la que contó este proyecto fue de US $14.82 millones, patrocinada por 44 inversores. El diseño de este BIS también contempla una garantía de inversión de US $1.32 millones financiada por Rockefeller Foundation. Es decir, en caso de no lograr el objetivo, Rockefeller Foundation otorgará a los inversores privados US $1.32 millones (pérdida del 90%de la inversión).
La meta planteada es reducir la reincidencia en 36.8 días y aumentar el índice de empleo de los ex convictos en un 5%. En caso de cumplirse con estos parámetros, los inversores podrían recibir hasta US $21.54 millones por parte del United States Department of Labor y del New York State Department of Labor.
Massachusetts
El BIS más reciente fue instaurado por el Social Innovation Financing Trust Fund y el United States Department of Labor en 2014, con el objetivo de evitar la reincidencia, ofrecer capacitación para el trabajo y mejorar las condiciones de empleo de 929 jóvenes (de entre 17 y 24 años) recién liberados.
La intervención, a cargo de Roca Inc., se centra en 2 años de capacitación para la vida y el trabajo, y otros 2 años de seguimiento a cada individuo. Para el desarrollo del proyecto Goldman Sachs’ Social Impact Fund realizó la inversión principal (US $8 millones), aunque también hubieron inversionistas secundarios.
Los indicadores de éxito de este proyecto son la disminución en 5.2% de los días de encarcelamiento, el número de ex convictos que permanecen en el programa de capacitación u obtienen un empleo. El pago por la disminución de la reincidencia puede llegar hasta los US $26 millones, mientras que el pago por los otros 2 indicadores se realizará conforme al número de personas beneficiadas.
El retorno máximo obtenido en caso de éxito depende del tipo de inversión. Por ejemplo, el principal inversionista, Goldman Sachs’ Social Impact Fund, recibirá un 5% adicional a su inversión más 1 millón de USD. El retorno de los otros inversionistas es menor.
La necesidad de mejores resultados en programas públicos es una constante en muchos ámbitos, por lo que los BIS también han sido utilizados en sectores como la educación, vivienda y salud, además de la reincidencia. En este sentido, vale la pena explorar la pertinencia de aplicarlos en los programas de prevención del delito o en el diseño de los fondos federales en seguridad en México.