Exigen medios libertad de prensa en EU... ¿y en México?

Más de 400 diarios se han unido a la protesta para la libertad de prensa en EU, al tiempo que en México el financiamiento a medios vuelve a ser un tema de conversación presupuestal.
23 Agosto, 2018 Actualizado el 23 de Agosto, a las 17:22
En marzo de 2018 la organización Media Owership Monitor (MOM) recomendó a medios mexicanos transparentar sus finanzas. Foto: Mustafa Khayat / algunos derechos reservados.
En marzo de 2018 la organización Media Owership Monitor (MOM) recomendó a medios mexicanos transparentar sus finanzas. Foto: Mustafa Khayat / algunos derechos reservados.
Arena Pública

“La prensa existe para servir a los gobernados, no a los gobernantes”, fue una de las citas que incluyó The Boston Globe en su editorial del 15 de agosto donde llamaba a medios de comunicación de todo Estados Unidos a unirse en su protesta contra los ataques del presidente Donald Trump.

La cita, tomada del ministro Hugo Black de la Suprema Corte de EU, fue escrita en 1971 y sin importar el país o el momento siempre debería ser una máxima para la sociedad, los miembros del gobierno y especialmente para quienes forman parte de los medios de comunicación.

Hoy tanto en México como en Estados Unidos se están viviendo situaciones adversas entre los gobernantes y los medios de comunicación que ameritan un espacio en la conversación de la sociedad.

Por un lado, el presidente Donald Trump no se ha cansado de difundir la idea de que los medios son “el enemigo del pueblo”, con excepción de las cadenas noticiosas de FOX, a quienes considera de los pocos que no publican “noticias falsas”.

Como respuesta, desde el 16 agosto más de 400 periódicos estadounidenses han publicado una editorial entre sus páginas para defender su libertad de prensa ante el presidente mismo y asegurar a la sociedad estadounidense que ellos no son sus enemigos.

 

Titulares de algunos periódicos de EU que se unieron a la protesta del Boston Globe.

Titulares de algunos periódicos en español de EU que se unieron a la protesta del Boston Globe. 

 

Por el otro, las altas sumas de dinero público recibidas por los medios de comunicación en México, resultado de contratos publicitarios con el gobierno federal y los gobiernos locales y su falta de transparencia financiera, hacen pensar que la prensa mexicana es demasiado amistosa con los gobernantes y políticos.

En marzo de 2018 la organización Media Owership Monitor (MOM), dedicada al monitoreo y evaluación de los niveles de transparencia de medios en diversos países, reportó que lo que le hacía falta a los periódicos mexicanos era informar más sobre sus estructuras ejecutivas y financieras.

Comentó que la información disponible al público sobre los dueños, editores y ejecutivos era “escasa y en numerosos casos confusa, contradictoria o inexistente”, adicionalmente mencionaban la prevalencia de la publicidad oficial como un “efecto corruptor” sobre los medios, ya que los hacía competir por tener mayores ingresos gubernamentales que otros.

No obstante, ése no es todo el panorama de la prensa en el país; también existen los casos de periodistas que, por su labor de investigación, han sido acosados, espiados, amenazados e incluso asesinados.

La posición de la prensa frente a quienes están al mando de un país nunca ha sido sencilla. Thomas Jefferson, uno de los padres fundadores de EU, dueño de periódicos -y quien ayudara a crear la primera enmienda que asegura la libertad de prensa- estuvo en su tiempo como presidente, en contra de los medios de comunicación.

 

Con cuarenta años de experiencia entre las desaventuradas conjeturas de los periódicos sobre lo que no se hace a plena luz del día, y de su falsedad incluso sobre eso, rara vez los considero dignos de leer

T. Jefferson,1816.

A partir del 1 de diciembre la prensa mexicana enfrentará un nuevo panorama. Andrés Manuel López Obrador aseguró que el gasto en publicidad oficial se reducirá a la mitad de lo ejercido en el sexenio de Enrique Peña Nieto.

Sin embargo, el colectivo Medios libres, ha señalado que esta reducción no resolverá el problema en la asignación arbitraria y discrecional de la publicidad oficial si no se cuenta con criterios claros, transparentes y objetivos, que identifiquen en todo momento la publicidad y busquen la publicación de información de interés y de utilidad, más no la promoción de la imagen de funcionarios públicos.

No obstante, para alcanzar la libertad editorial también es necesario un cambio interno en los medios de comunicación para no depender del financiamiento de un solo ente, de tal manera que recuerden que “la prensa existe para los gobernados, no para los gobernantes”.

 

MÁS INFORMACIÓN: Los periodistas no son el enemigo. The Boston Globe. 

MÁS INFORMACIÓN: Sí a la reducción del gasto en publicidad oficial, pero con criterios claros de asignación. Artículo 19.