Ni fallo de SCJN cambia el destino de la Reforma Energética: Expertos
La Reforma Energética sigue su camino a votarse en la Cámara de Diputados, sin cambios significativos ni posibilidades de ser aprobada.
Varios acontecimientos a lo largo de los últimos días han puesto los reflectores en el futuro del proyecto legislativo. El más notorio fue el voto fallido de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) respecto a las reformas a la Ley de la Industria Eléctrica (LIE), que quedó a un sufragio de una declaración de inconstitucionalidad.
Sin embargo, las comisiones de Puntos Constitucionales y de Energía de la Cámara de Diputados también dieron a conocer en los últimos días el dictamen de la iniciativa de Reforma Energética, que poco después recibió el visto bueno de la Comisión de Medio Ambiente y Recursos. ´
Asimismo, los partidos de la oposición presentaron una serie de propuestas alternativas a la iniciativa del presidente, que al inicio parecían abrir una puerta a la negociación con el partido en el poder para la eventual aprobación de la Reforma Energética.
Y los Estados Unidos, a través de la representante comercial Katherine Tai, emitieron la que hasta ahora es la declaración más contundente de oposición a la propuesta legislativa de Andrés Manuel López Obrador (AMLO). En su carta incluso advirtieron a la titular de la Secretaría de Economía, Tatiana Clouthier, que se considerarían “todas las opciones disponibles bajo los términos del T-MEC” para proteger 10 mil millones de dólares (MD) en inversiones energéticas estadounidenses que, de acuerdo con Washington, están en riesgo por la reforma.
Pero ninguno de estos eventos parece haber hecho diferencia alguna, ni en el texto de la iniciativa, ni en el resultado final de la votación. La Reforma Energética llegará al pleno de la Cámara sin cambios materiales, señala Rosanety Barrios, analista independiente de energía y consejera de la iniciativa Voz Experta. Y el resultado de su votación en el pleno no parece que será favorable para la propuesta legislativa. “No tienen los votos. Si la alianza [de la oposición] no apoya, y Movimiento Ciudadano no apoya, [Morena] no llegará a los votos que necesita”, agrega.
Pero no sería un desenlace desfavorable para el gobierno federal. “[La Reforma Energética] se quería utilizar como un símbolo. Pero se convirtió en un símbolo poco atractivo, porque la gente no tiene ni la más remota idea de lo que consiste, o no le importa”, asegura Severo López Mestre, especialista en energía.
“Por eso la reforma constitucional no va a pasar en el Congreso. Y me parece que eso es parte del ‘script’ presidencial. Que no pase no es una derrota, es algo que se quiere. Porque el costo político y económico es mucho mayor de lo que te puede representar [la Reforma] como símbolo político-electoral. No tiene sentido incurrir en costos si ya sabes que no tiene arrastre”, agrega.
La SCJN, la LIE y la Reforma Energética
La noticia que las reformas a la LIE habían sobrevivido el proceso de la Suprema Corte, que se quedó a un voto de declararlas inconstitucionales, fue promovida por varios aliados y miembros del Gobierno federal como una victoria.
La misma titular de la Secretaría de Energía (Sener), Rocío Nahle, señaló que el desenlace significaba que la SCJN “avaló la constitucionalidad de la Ley de la Industria Eléctrica”. Y otros agentes sugirieron que la resolución podría tener un impacto favorable para la votación de la Reforma Energética la próxima semana.
Pero ambas conclusiones serían erróneas. Sobre el supuesto aval de la Corte a la LIEA, “en las acciones de inconstitucionalidad, se necesitan ocho votos [en la SCJN] para invalidar la ley […]. Si se logran seis o siete, no se invalida la ley, y la acción de inconstitucional se desestima. Es como si nunca se hubiera presentado y todas las cosas siguen igual” aclara Javier Martín Reyes, investigador en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Sin embargo, una cosa es desestimar la acción de inconstitucionalidad y otra decir que la Suprema Corte diga que es válida la ley. De acuerdo con el especialista, “para que la Corte valide una ley, se necesitan seis o más votos a favor de la validez. Y en este caso, solo tuvimos tres o cuatro votos. Decir que la validó es incorrecto, porque no lo hizo. Pero tampoco la invalidó, porque no se alcanzaron los votos suficientes”.
Lo anterior significa que todos los amparos individuales que las empresas del sector eléctrico presentaron contra la LIE siguen vigentes y seguirán su curso legal. Su resolución había quedado en pausa en lo que se resolvía la acción de inconstitucionalidad ante la SCJN, y como la Corte no validó ni invalidó la Ley, cada compañía tendrá que defender su caso ante tribunales menores. “No sabemos qué va a pasar. [La decisión de la SCJN] lo único que hace es prolongar el conflicto y hacer que se resuelva por la vía de los amparos y no por las acciones”, agrega Martín Reyes.
Este panorama de incertidumbre podría ser resultado de un cálculo muy delicado de la Suprema Corte, analiza Severo López Mestre. “Para declarar la inconstitucionalidad necesitas ocho votos, y necesitas seis para validarla, en una Corte con un [Arturo] Zaldívar que siempre ha estado muy cercano al bloque de López Obrador. Y Zaldívar sabía perfectamente bien que si [votaba contra la inconstitucionalidad], iba a ser muy difícil conseguir ocho votos. Y así quedas bien con Dios y con el Diablo. No la votaste inconstitucional, ni la hiciste válida. Es perverso porque quedas bien políticamente, como ministro y como SCJN, pero el daño es monumental al sector eléctrico porque lo dejas en el limbo, y prolongas esta incertidumbre”, dice López Mestre.
En última instancia, sin embargo, la resolución de la Corte respecto a la LIE no debería tener mayor efecto en lo que discutirá la Cámara de Diputados la próxima semana respecto a la Reforma Energética.
“No creo que esté vinculado. Son dos cosas diferentes. Lo que sucedió ayer, es que no alcanzaron los votos para declarar [la LIE] inconstitucional. Esta ley puede continuar operando, y en la medida que haga daño, las empresas se pueden amparar. El amparo permite a un particular protegerse de decisiones del gobierno argumentando que no se respetó lo que dice hoy la Constitución. [La Reforma Energética] busca cambiar lo que dice hoy la Constitución. Son cosas distintas. [Y la decisión de la SCJN no debería afectar la votación de la Cámara de Diputados] porque son dos cosas distintas, son dos poderes diferentes, son actos distintos, son personas diferentes y se les están pidiendo cosas distintas”, señala Rosanety Barrios.