¡Arranca consulta para el NAIM en medio de una lluvia de cuestionamientos!
A las ocho de la mañana del jueves 25 octubre dio inicio una consulta ciudadana que definirá mucho más que el futuro del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM).
El resultado que se dará a conocer la noche del 28 de octubre tras cuatro días en que los ciudadanos podrán ir a expresar su opinión respecto al tema, podría traer enormes consecuencias sobre la confianza de los capitales e inversionistas del mundo, algo que -aún antes de empezar la consulta- ya se empezó a notar.
Las incógnitas que genera la metodología por la cual se lleva a cabo la consulta -y el ejercicio en sí mismo- han hecho pensar a más de un grupo de analistas especializados que esto no es más que un procedimiento por el cuál Obrador legitimará cualquiera que sea la decisión que tome.
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“Creemos que el anuncio de AMLO en realidad reflejará su preferencia personal como resultado de la consulta pública”, se lee en un comunicado especial publicado por Citibanamex el 23 de octubre en el cual también advierten que el presidente electo estaría en la antesala de cometer “el error de octubre”, haciendo una clara referencia al “error de diciembre” de 1994 que desató una de las peores crisis económicas en la época moderna mexicana.
Por su parte, la calificadora de riesgo Moody’s advirtió desde abril que la cancelación del NAIM no solo traería consecuencias negativas crediticias para el MEXCAT (Fideicomiso del Aeropuerto de la Ciudad de México) sino también para el sector aeroportuario mexicano en general.
Aún sin una calificación negativa por parte de Moody´s, al irse acercando el día de la consulta los precios de los bonos del aeropuerto experimentaron una caída durante el mes de octubre cercana al 7%.
No solo son los actores involucrados en el sector financiero quienes han cuestionado la metodología de la consulta. Luis de la Calle, consultor privado y renombrado economista mexicano, a través de su columna de opinión en el diario El Universal, advirtió sobre las deficiencias de las consultas y los riesgos que implicaría cancelar o concesionar totalmente el NAIM.
“Los gobiernos pueden, por supuesto, cambiar de opinión, modificar planes, enmendar leyes, retirarse de tratados internacionales e incluso repudiar deudas. No obstante, para ellos se requiere de un procedimiento apegado al marco jurídico y al compromiso con la democracia; la consulta de esta semana no cumple ni con uno ni con otro”.
Desde un escritorio distinto, José Woldenberg, Sociólogo y Doctor en Ciencia Política quien actualmente es catedrático en la Universidad Nacional Autónoma de México, destacó que la consulta se puede convertir en un precedente ominoso: “Una fórmula ´alegal´, diseñada a voluntad de los convocantes sin garantías de integridad, equidad y transparencia.
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El diseño de la consulta no solo ha sido criticado desde la parte teórica, sino también en la operacional. Sebastián Garrido, profesor-investigador del Laboratorio Nacional de Políticas Públicas, diseccionó la metodología de la encuesta y encontró -entre otras cosas- que los municipios en los que se realizará no son los más poblados del país como afirmó el vocero del futuro presidente, Jesús Ramírez.
“La lista de 538 municipios considerados por los organizadores de la consulta no incluye a 102 de los 502 municipios que forman parte del subconjunto de municipios que conjuntan al 80% de población nacional, esto implica que sí incluyeron a 138 municipios que no están entre los 502 más poblados del país (502 – 102 + 138 = 538)”.
Por lo anterior concluye que, el factor del tamaño de la población es insuficiente para explicar la elección de los municipios que participarán en la consulta.
Alejandro Moreno, especialista en opinión pública, tras varios ejercicios, concluyó que la mayoría de la población apoya el aeropuerto en Texcoco, sin embargo, el diseño de la pregunta que aparecerá en la boleta inclina la balanza hacia Santa Lucía.
Al cuestionar a las personas sobre si preferían “continuar el actual proyecto en Texcoco” o “la construcción a Santa Lucía”, el 55% eligió el NAIM, mientras que el 37% la propuesta de Obrador.
Sin embargo, el fraseo de las boletas: “Reacondicionar el actual aeropuerto de la Ciudad de México y el de Toluca, y construir dos pistas en la base aérea de Santa Lucía” contra “Continuar con la construcción del nuevo aeropuerto en Texcoco, y dejar de usar el actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México” muestran que la gente opta con 53% por la primera opción, mientras que 46% se inclina por la segunda.
De esta manera, en medio de cuestionamientos de teóricos y técnicos, dio inicio una consulta que definirá mucha más que el futuro del aeropuerto.
MÁS INFORMACIÓN: Los municipios de la consulta del aeropuerto, Sebastián Garrido
