Tensiones geopolíticas en máximos, amenazan las inversiones y la economía

La extensión del conflicto en Medio Oriente, la guerra en Ucrania, la situación fiscal en Estados Unidos, reviven el fantasma de la inflación, presionan a los bancos centrales y endurecen las condiciones financieras.
20 Octubre, 2023 Actualizado el 20 de Octubre, a las 10:17
Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal.
Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal.
Arena Pública

La creciente posibilidad que el conflicto en Medio Oriente se amplifique más allá de la Franja de Gaza, mientras que la guerra en Ucrania continúa, está provocando importantes repercusiones sobre los mercados financieros, las decisiones sobre las tasas de interés y el desempeño del futuro inmediato de la economía global.

Los altos rendimientos de los bonos de largo plazo estadounidenses, derivado de los mayores riesgos geopolíticos y de las preocupaciones sobre la situación fiscal, han endurecido las condiciones financieras con consecuencias negativas sobre las inversiones en países emergentes, como México.

A esta hora del viernes el petróleo Brent superó los 93 dólares por barril, un alza acumulada de 10% en las últimas dos semanas, derivado del mayor riesgo de un conflicto extendido en la región. La inminencia de la incursión terrestre israelí en Gaza y de un frente abierto de conflicto en la frontera con Líbano, mientras crecen los incidentes en países vecinos ante la mayor presencia de tropas estadounidenses, ha puesto en alerta a los inversionistas y analistas ante una escalada militar.

Los banqueros centrales, quienes pensaban haber hecho lo suficiente en los últimos meses con tasas de interés altas para controlar la inflación, ahora están viendo cómo éstos nuevos riesgos geopolíticos se añaden a un coctél de factores que complica aún más su lectura sobre la tendencia futura de los precios.

"No se trata de una reacción irreflexiva... Hay que formarse algún tipo de opinión sobre... un precio del petróleo a 150 dólares el barril", dijo el economista en jefe del Banco de Inglaterra, Huw Pill, citado por Reuters, en un evento realizado esta semana sobre el escenario en el que las hostilidades entre Israel y Hamas comienzan a escalar.

Pero el incremento en los precios petroleros es solo un factor a tomar en cuenta, aún y cuando los precios petroleros no alcanzaran los 150 dólares por barril. Una extensión del conflicto en Medio Oriente genera mayor incertidumbre con consecuencias sobre las decisiones de política monetaria de los bancos centrales.

En su discurso de este jueves en el Club Económico de Nueva York, Jerome H. Powell, presidente de la Reserva Federal (Fed), advirtió que "las tensiones geopolíticas son muy elevadas y plantean riesgos importantes para la actividad económica mundial. Nuestro papel institucional en la Reserva Federal es monitorear estos acontecimientos por sus implicaciones económicas, que siguen siendo muy inciertas".

Los analistas esperan que tanto el Banco Central Europeo como la Reserva Federal estadounidense mantengan durante un tiempo prolongado los altos niveles de tasas de interés que han alcanzado. Sin embargo, "el aumento en los precios del petróleo podría impulsar la inflación, obstaculizando los esfuerzos de los bancos centrales para reducir los precios. Los mayores costos de la energía también podrían obligar a las empresas y los consumidores a recortar el gasto. Eso probablemente debilitaría el crecimiento, pero también podría desacelerar la economía lo suficiente como para anular la necesidad de un aumento adicional de las tasas de interés", dice una nota del New York Times de este viernes.

Esta perspectiva de un tiempo indeterminado de tasas altas y las creciente preocupaciones fiscales en Estados Unidos, azuzadas por la petición de nuevos apoyos presupuestales a los aliados en Ucrania e Israel, han provocado que los rendimientos de los bonos a 10 años tocaran 5% en la noche del jueves, un nivel no visto desde hace 16 años. Ahora se cotizan en 4.92%, provocando caídas en los mercados accionarios a la apertura del viernes y un duro golpe a los mercados hipotecarios.

En México, el rendimiento de los bonos del gobierno a 10 años está en 9.95%, desde el 9.99% del jueves, un nivel que según los analistas se mantendrá por un tiempo prolongado. Y es que mientras los bonos del gobierno se mantengan a este nivel, los inversionistas también exigirán mayores rendimientos por activos de más riesgo, como los bonos corporativos, encareciendo el fondeo para las empresas, los costos del crédito y, en general, endureciendo las condiciones financieras.

"El conflicto de Israel puede escalar y, sin duda, habrá consecuencias en los commodities, afectando la perspectiva de inflación y crecimiento", dijo Marco Oviedo, economista y Estratega Senior para América Latina en XP Investments. Rendimientos altos en los bonos de largo plazo tanto en Estados Unidos como en México van a afectar las inversiones, dice Oviedo. "Con una tasa en Mexico de 9.0% u 8.5%, ¿qué proyecto te da más de eso, seguro, en 10 años?", añade.

El miércoles, Elon Musk, director ejecutivo de Tesla, dijo que es cauteloso acerca de "ir a toda máquina" con el proyecto de una gigafábrica en Monterrey debido a su preocupación por la macroeconomía y las tasas de interés. "Si las condiciones macroeconómicas son tormentosas, incluso el mejor barco va a pasar tiempos difíciles", dijo Musk. Una nota de Reuters agrega que "cuando se le presionó para que diera detalles sobre la fábrica, Musk dijo: 'Estoy marcado por el año 2009, cuando General Motors y Chrysler quebraron'".