Banxico sube tasa, en votación 4-1, y prevé más inflación por más tiempo

La Junta de Gobierno del banco central revisó fuertemente al alza su expectativa de inflación para el cierre de año a 6.2%, desde 5.7% previsto en agosto.
1 Octubre, 2021 Actualizado el 1 de Octubre, a las 07:19
Será hasta el tercer trimestre de 2023 cuando la inflación converja con el objetivo. (Foto: Gobierno de México)
Será hasta el tercer trimestre de 2023 cuando la inflación converja con el objetivo. (Foto: Gobierno de México)
Arena Pública

El Banco de México volvió a retrasar su perspectiva de inflación acorde a su objetivo. Ahora prevé que su objetivo puntual, de 3%, se logrará en el tercer trimestre de 2023, dada "la diversidad, magnitud y el extendido horizonte" de los choques que afectan a los precios.

Así, el banco central mexicano decidió subir en 0.25 puntos base la tasa de interés objetivo -tasa de interés interbancaria a un día- a 4.75% y continuar con el ciclo restrictivo iniciado en junio, en una decisión esperada por todo el mercado. Sin embargo, llamó la atención entre algunos analistas, que la decisión que tomó la Junta de Gobierno no fuera unánime.

El subgobernador Gerardo Esquivel votó por mantener la tasa en 4.50%, mientras que los otros cuatro subgobernadores -entre ellos Galia Borja, quién había votado en las dos últimas reuniones junto a Esquivel por mantener la tasa- decidieron aplicar la tercera alza consecutiva de 25 puntos base. Las anteriores alzas se dieron el 24 de junio y el 12 de agosto.

Para la primera quincena de septiembre, el incremento anual del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) sumó 13 quincenas consecutivas por encima del rango objetivo de Banxico, al ubicarse en 5.87%, una sorpresa para los expertos luego de dos quincenas con ligeras disminuciones.

Si bien el alza de la tasa de referencia estaba descontada por el mercado, los ojos se posaron sobre los nuevos pronósticos de inflación a mediano plazo del banco central.  “El comunicado de política monetaria emitido hoy por Banxico es muy similar al anterior.  Por mucho, lo más importante del boletín de hoy fueron las revisiones al alza de los pronósticos de inflación. Más inflación por más tiempo” señaló Alonso Cervera, economista en jefe para América Latina de Credit Suisse. 

Las perspectivas inflacionarias tuvieron una importante revisión, pues mientras en el anterior pronóstico se estimaba que la convergencia de la inflación con el objetivo de Banxico se alcanzaría en el primer trimestre de 2023 ahora se retrasó al tercero. Signo de que la temporalidad de la inflación se hizo larga. Apenas en junio el banco central estimaba regresar a su objetivo puntual en 2022.

Pero también la Junta de Gobierno revisó fuertemente al alza su expectativa de inflación para el cierre de este año, que pasó de 5.7% en agosto hasta 6.2% en este nuevo comunicado; un nivel acorde a las expectativas del mercado y superior a cualquiera que se haya alcanzado en este año.

La larga inflación y la larga insistencia de transitoriedad

El subgobernador Esquivel ha defendido su postura frente a la mayoría de los miembros de la Junta de Gobierno advirtiendo que el alza de tasa “podría dar un mensaje equivocado”. 

El mensaje equivocado que da, señala, es la idea de que la inflación es permanente, lo que según argumenta podría generar perspectivas equivocadas entre los analistas, así como en los empresarios y trabajadores, que ajustarán precios y negociaciones salariales contaminando -ahora sí- de forma permanente los precios. 

Para la mayoría de los expertos del sector privado, la inflación continuará alta bastante tiempo y en la opinión de varios de ellos, el argumento de la transitoriedad ha quedado ampliamente superado, por lo que incluso los aumentos mínimos de la tasa en las últimas tres juntas se están volviendo insuficientes. 

“El enfoque gradualista seguido por la política monetaria en el país ya no espanta a la inflación. Por lo que se necesitan acciones firmes y contundentes de parte de la autoridad monetaria”, advirtió en su cuenta de Twitter el economista en jefe de Moody´s Analytics, Alfredo Coutiño.

Sin embargo, los principales bancos centrales del mundo siguen defendiendo la transitoriedad inflacionaria, si bien han reconocido que será más larga de lo que esperaban inicialmente. 

En Europa, dónde la inflación es de 3%, por arriba del objetivo de 2%, las alarmas se están encendiendo hacía el pronóstico de 3.5% para noviembre. Y aunque los analistas estiman que luego de alcanzar el pico, la inflación comenzará a bajar hacía el objetivo, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, advirtió que el panorama económico sigue siendo incierto, principalmente porque no se sabe hasta cuándo se resolverán los cuellos de botella que están golpeando a las cadenas de suministro que abastecen el continente. 

El presidente de la Reserva Federal (Fed) de los Estados Unidos, Jerome Powell, también ha continuado defendiendo la transitoriedad inflacionaria además de negarse al alza de tasas para evitar impactar en la recuperación económica, entre ella la del empleo, parte del mandato dual de la Fed. 

Pero así como Esquivel, Powell se está quedando solo. En la última decisión de política monetaria de la Fed, la encuesta interna de la FOCM, señaló que la cantidad de gobernadores que se sumaron al bando hawkish llegó a la mitad del total. Este 

El nuevo tono de la Fed, adoptado ahora por la mayoría de los miembros de la Junta, diluye las dudas acerca de la continuidad del ciclo restrictivo luego de que en la decisión pasada un miembro de la junta sugiriera que la última alza posiblemente “era suficiente”.