Remesas en enero siguieron al alza, aumentaron 7.5% en relación con 2017
El pasado enero, el flujo de remesas se volvió el más alto, según datos de Banco de México registrados desde 1995.
Lo que implica que estos ingresos continuarán dando soporte a las familias de entidades como Guerrero, Michoacán, Oaxaca e Hidalgo.
El indicador situó a las remesas en 2 mil 216 millones de dólares, un récord para un mes de enero y un crecimiento de 7.5% respecto al mismo mes del año pasado.
Tal volumen de remesas es reflejo de la fortaleza del mercado laboral de Estados Unidos, la posición relativa del dólar al peso y, recientemente, las perspectivas de los migrantes ilegales de las posibilidades de permanecer en ese país.
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En los últimos dos años estos tres elementos se han combinado para impulsar el flujo de remesas a México, creciendo 8.9% en 2016 y 6.6% en 2017.
Al cuarto trimestre de 2017 alcanzaron un nivel sin precedentes de 7 mil 506 millones de dólares. Es decir, mayor a los ingresos por exportación de petróleo (7 mil 359 mdd), de productos agropecuarios (4 mil 288 mdd), de inversión extranjera directa (5 mil 903 mdd) y por turismo internacional (4 mil 814 mdd).
Esto ha funcionado como un factor de apoyo en la evolución del consumo privado. En particular en algunas entidades federativas en donde la contribución de las remesas se equipara o supera los ingresos que tienen los trabajadores formales en el país.
En esta relación, al cuarto trimestre de 2017 las remesas equivalieron al 320% del salario de los trabajadores en Guerrero, 131% en Michoacán y Oaxaca, 118% en Hidalgo, 92% en Zacatecas y 72.5% en Nayarit. A nivel nacional las remesas equivalieron al 23.7% de la masa salarial.
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