Tras el NAIM, aún no están escritas todas las reglas del juego con AMLO
¿Por qué es importante? Aún Andrés Manuel López Obrador no comienza a gobernar y el presupuesto para 2019 no se ha presentado todavía, por lo que el tablero inicial para los próximos seis años aún no esta totalmente puesto.
El panorama general: Tras la confirmación de la cancelación de NAIM por AMLO y las declaraciones por parte del sector empresarial de posibles acciones legales y advertencias sobre costos económicos para el país, México sufrió un lunes negro.
Con un cierre de 20.06 unidades por dólar, el peso tuvo su peor jornada en relación con el dólar interbancario, desde el 11 de noviembre de 2016, cuando se confirmó la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
La Bolsa Mexicana de Valores cayó 4.2% y las acciones de las principales aerolíneas y grupos aeroportuarios del país registraron pérdidas por encima del 2.2% y hasta el 8.05%, en el caso de Aeroméxico.
El estado de las cosas: La confianza de los mercados frente a la administración de AMLO que aún no entra a Los Pinos podría parecer perdida con la cancelación del NAIM; sin embargo, esto todavía no luce definitivo.
Lo que están diciendo: John Authers, editor en jefe de la sección de mercados de Bloomberg comentó que “deshacerse de esto [el aeropuerto de Texcoco] antes de que tome formalmente el poder podría ser un gran gesto simbólico para su gente para mostrar que está de su lado, lo que le da más espacio para hacer algunas cosas que a los inversionistas internacionales les agrade y a los locales no”.
¿Qué hay detrás? Desde el 2014 el semanario Proceso reportó que la construcción del NAIM era el gran negocio del grupo Atlacomulco, del que emergió el presidente Enrique Peña Nieto, debido a que los terrenos que rodeaban la zona fueron comprados por ellos y otros empresarios.
Y es que el proyecto del aeropuerto se tenía planteado desde el último año del sexenio de Zedillo y fue Vicente Fox, quien lanzó la convocatoria que planteó las opciones de Tizayuca, Hidalgo, y Texcoco en el Estado de México. Ganó Texcoco, pero debido a los movimientos de San Salvador Atenco, la obra se suspendió indefinidamente.
El tema de compra de terrenos alrededor del NAIM también fue retomado en marzo de 2018 por el columnista Salvador García Soto, quien publicó que el gran negocio del grupo político era construir un proyecto urbano de 4 mil 431 hectáreas con infraestructura, trasporte, servicios, comercios y viviendas alrededor de la nueva zona aeroportuaria. Un negocio millonario.
¿Qué hay que ver? Antes de las elecciones el sector empresarial, especialmente el extranjero, tomó una actitud de “vamos a esperar a ver” antes de invertir, comentó el economista y analista Oscar Vera para Arena Pública en junio de 2018.
Esto debido a que si bien AMLO aún no era presidente todavía faltaba mucho por ver, especialmente en cuestión de gasto público y toma de decisiones.
El factor más importante: AMLO llegará con un triunfo legitimado por más del 50% de los votantes, su partido es mayoría en el Congreso, pero cuenta con tan poco margen de maniobra sobre el presupuesto que necesita del apoyo de la inversión privada. El NAIM fue el primer asalto. Hay que estar atento a las señales que seguirán.
MÁS INFORMACIÓN: Los inversionistas todavía podrían arropar a AMLO.
