Prevén ritmo de crecimiento mediocre y recuperación podría llegar hasta 2025: Minuta Banxico

En la Junta de Gobierno prevalece la opinión sobre el mal desempeño de la actividad económica y la fragilidad de la recuperación, aún lejos de completarse.
26 Noviembre, 2021 Actualizado el 26 de Noviembre, a las 14:13
Durante el tercer trimestre, la economía cayó dos décimas más de lo originalmente previsto. (Foto: Pexels)
Durante el tercer trimestre, la economía cayó dos décimas más de lo originalmente previsto. (Foto: Pexels)
Arena Pública

A la economía mexicana todavía le quedan tres años para recuperar su dinamismo, estimó uno de los miembros de la Junta de Gobierno del Banco de México en la más reciente minuta.

Según este miembro, no identificado por nombre, la velocidad de la recuperación económica se normalizará al crecimiento mediocre que ha caracterizado a la economía mexicana en la última década y media, por lo que el ritmo de crecimiento, sin pandemia, se verá hasta 2025.

"Por la inserción de México en las cadenas globales de valor, los términos de intercambio han comenzado a verse afectados, particularmente mediante las exportaciones no petroleras no automotrices, lo que implicaría una restricción externa al crecimiento económico", relata la minuta. "Probablemente la velocidad de la recuperación económica comenzará a normalizarse hacia el promedio histórico de crecimiento... no sería posible alcanzar antes del 2025 el nivel de actividad que habría en ausencia del COVID-19", dijo.

Dos de los cinco miembros de la Junta "señalaron que se mantiene un entorno incierto para la actividad económica".

El pesimista pronóstico se da el mismo día en que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dió a conocer que la revisión del Producto Interno Bruto (PIB) no solo para el tercer trimestre, sino también para los dos previos, fueron menores a los originalmente publicados. 

“El INEGI corrige el PIB para el tercer trimestre a la baja, de -0.23% a -0.43%, pero también revisa a la baja los tres trimestres anteriores”, apuntó en un tweet Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México (Banxico).

En los tres meses previos, los pronósticos de crecimiento para el cierre de 2021, se mantuvieron por encima del 6% luego de un inicial optimismo económico en el primer semestre del año, sin embargo con los últimos resultados negativos presentados por el Inegi, los nuevos pronósticos adoptaron una tendencia negativa hasta llegar al 5.9% según la última encuesta de expectativas Citibanamex. 

Y aunque un crecimiento incluso sólo mayor a 5% sigue duplicando el promedio de crecimiento de años anteriores, este resultado no se debe a un mejor desempeño, sino a un simple efecto aritmético.  

“La economía mexicana se contrajo en tres de los últimos cuatro meses y en seis de los nueve entre enero y septiembre (variaciones mensuales). El crecimiento anual cercano a 6% en 2021 reflejará principalmente una baja base de comparación”, explicó en un tweet Alonso Cervera, economista en Jefe de Credit Suisse. 

Este efecto terminará de “impulsar” el crecimiento económico apenas comience el nuevo año, por lo que el crecimiento económico se reducirá a 2.9%, según el sondeo de Citibanamex entre los economistas del sector.

“Para el próximo año tenemos un pronóstico de 2.6%, menos de la mitad de lo que esperamos para este año. Esto va de la mano a la disipación de este efecto rebote que favoreció al crecimiento este año por una base de comparación tan fácil por  la contracción de la economía en 2020” comentó en entrevista Alejandro Saldaña, economista en jefe del banco BX+.

El economista en jefe de Moodys Analytics, Alfredo Coutiño, tiene una perspectiva aún más oscura para la economía a corto plazo, pues señala que la capacidad productiva en un ambiente de reticencia a la inversión no permitirá un crecimiento sustantivo el próximo año.

“Con los datos del PIB corregidos hasta 3T y dada la debilidad mostrada, la economía se encamina a un crecimiento de alrededor de 2% en 2022, y cuando mucho de 2.5%”, comentó el economista en Twitter

Avances en algunos sectores clave, pero retrocesos en otros

La revisión a la baja del tercer trimestre se dió principalmente por un peor resultado al esperado en la actividad económica de septiembre, que se contrajo 0.4%. 

Se trata de la segunda caída mensual consecutiva y pese a que fue menor a la de agosto, se diferenció por presentar contracciones en los tres sectores -primario, secundario y terciario- de la actividad económica.

“Viendo la integración sectorial del Producto Interno Bruto en 2021-T3, los sectores que empujaron a la baja su crecimiento fueron Servicios de apoyo a los negocios (-48.1% a/a cifras originales), Luz, agua y gas (-1.6%), Servicios financieros (-1.4%) y educativos (-0.1%)” señaló en su cuenta de twitter, Julio Santaella, presidente del Inegi. 

Saldaña explica que pese a que algunos importantes subsectores de la economía como la producción petrolera y el turismo presentaron resultados positivos, hubo otros sectores igual o más importantes para la economía que contrarrestaron lo que hubiera podido ser un potencial crecimiento.

“Observamos [en el sector terciario] que parte de la debilidad viene de los reacomodos que generó la aplicación de los cambios en materia de subcontratación laboral, muy específicamente en los servicios profesionales y de apoyo a negocios. El resto de los componentes, quitando el tema comercial, tuvieron un incremento como hospedaje, transporte, servicios de preparación de alimentos relacionado a la baja en contagios”, comentó Saldaña. 

Pese al efecto negativo de la reforma, los analistas consideran que desaparecerá rápidamente en los próximos meses al ser un evento único, al contrario de la escasez mundial de insumos  manufactureros -principalmente de chips semiconductores- que no se espera hasta el segundo trimestre de 2022, por lo que  seguir limitando la actividad ven los tres siguientes trimestres.

En el caso de la industria, la crisis automotriz, que detuvo la producción de General Motors, la mayor armadora en México, durante prácticamente todo el mes, evitó el posible incremento que hubiera habido gracias al repunte del valor de la producción petrolera. 

“Esta debilidad en la manufactura contrarrestó algunos de los avances que vimos en la minería, particularmente en la petrolera que reflejó un rebote asociado a la recuperación de la producción después de que en el mes anterior se vió afectada por los accidentes que tuvo Pemex en una de sus plataformas” explicó el economista de BX+.

Para el último trimestre del año, la mayoría de los analistas espera que haya un modesto rebote en la actividad económico con el que se recupere la senda de recuperación, sin embargo, advierten que esta senda tendrá menor ritmo que en trimestres anteriores, además de no estar exenta a nuevos riesgos como una cuarta ola de COVID 19, que podría limitar levemente el crecimiento.