UE multa a BMW y a Volkswagen por prácticas antimonopólicas
La Unión Europea (UE) anunció este jueves una multa que asciende a los 875 millones de euros a las compañías automotrices alemanas BMW y el grupo Volkswagen (Volkswagen, Audi y Porsche) por frenar la competencia durante 5 años en el desarrollo de los sistemas de control de emisiones.
Las empresas mencionadas, junto a Daimler (Mercedes-Benz), colaboraron entre 2009 y 2014 intercambiando información sobre sus tecnologías para limpiar las emisiones contaminantes, lo que limitó el desarrollo técnico, infringiendo así las normas de competencia europeas.
En un comunicado de prensa, la comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, apuntó que “los fabricantes evitaron deliberadamente competir en el desarrollo de lo que exigían las normas de emisión de la UE. Y lo hicieron a pesar de que la tecnología estaba disponible”. Cabe señalar que Daimler no fue multada tras revelar la existencia del cártel a la comisión.
De igual manera Vestager señaló que la UE "no tolera cuando empresas coluden". Y añadió que no dudarán en "tomar acciones contra cualquier forma de cartel que amenace los esfuerzos adoptados para la reducción de emisiones”.
BMW fue la primera compañía en dar una declaración, al mencionar que la UE entró en "territorio inexplorado para la ley antimonopolio con su decisión”, aunque la empresa reconoció su participación y llegaron a un acuerdo para cerrar el caso y minimizar la multa. La empresa tendrá que desembolsar 372 millones de euros, luego de una reducción de 10% por haber reconocido el caso.
Por su parte Volkswagen mencionó que "la UE está abriendo nuevos caminos legales con esta decisión, porque es la primera vez que procesa la cooperación técnica como una violación antimonopolio".
"También está imponiendo multas a pesar de que el contenido de las conversaciones nunca se implementó y, por lo tanto, los clientes nunca fueron perjudicados", agregó el grupo automotriz. La empresa deberá pagar 502 millones de euros, gracias a una reducción de condena del 55% por su colaboración.
De acuerdo con la Comisión Europea es la primera vez que se impone una multa por colusión para detener el desarrollo tecnológico en materia de reducción de contaminantes, y no por prácticas de repartición de mercado o una coalición de precios.
No obstante, el caso se relacionó directamente con el escándalo del "diesel gate'' de la última década, donde Volkswagen admitió que alrededor de 11 millones de vehículos diésel en todo el mundo estaban equipados con un software engañoso, lo que le costó una multa de 30 mil millones de euros.