Empresas han encontrado en la IA la llave del crecimiento ¿sostenido?

Nvidia es una de las empresas que, al apostar por la Inteligencia Artificial, se convirtió en el primer fabricante de chips del mundo con una capitalización de mercado de 1 billón de dólares, aunque no es el único gigante tecnológico que ha sido beneficiado por este tipo de desarrollos.
1 Junio, 2023 Actualizado el 1 de Junio, a las 12:47
Ante esta situación, surge la pregunta de qué sucederá cuando este ciclo de altas expectativas en torno a la inteligencia artificial llegue a su fin. (Imagen: iStock)
Ante esta situación, surge la pregunta de qué sucederá cuando este ciclo de altas expectativas en torno a la inteligencia artificial llegue a su fin. (Imagen: iStock)
Arena Pública

La fiebre de la Inteligencia Artificial ha pegado en todos los ámbitos de la vida, y es probable que las empresas que han apostado por esta tecnología hayan encontrado una puerta hacia el crecimiento. Las impresionantes ganancias del primer trimestre fiscal de Nvidia ayudaron a cuantificar este fenómeno, llevando a la empresa a un grupo selecto de líderes tecnológicos con una valoración de mercado de $1 billón, consolidando su posición de liderazgo tanto en Wall Street como en Silicon Valley.

Nvidia ha reafirmado un punto crucial tanto para los mercados como para la economía: la inteligencia artificial es el futuro, ya sea para bien o para mal. La compañía informó de una ganancia de $1.09 por acción sobre unos ingresos de $7.19 mil millones, ambos muy por encima de las estimaciones de Wall Street. Además, Nvidia proyecta ventas por un valor de $11 mil millones para el trimestre actual, impulsadas en gran parte por su liderazgo en el negocio de chips de inteligencia artificial.

Como resultado, las acciones subieron casi 39% sólo durante el mes de mayo. Y aunque esto representa un gran hito para la empresa y el sector, no es la única compañía que ha apostado por la IA , y ha ganado.

Las acciones de Marvell Technology también experimentaron un fuerte repunte después de que sus ingresos alcanzaron los $1.32 mil millones para el trimestre, superando el consenso de analistas de $1.3 mil millones. Las acciones se cotizaron a niveles que no se habían visto desde abril de 2022.

Durante una conferencia telefónica con analistas, el CEO de Marvell, Matthew Murphy, citado por CNBC noticias, destacó que la compañía ha comenzado a reconsiderar la forma en que ve el enorme potencial comercial de la inteligencia artificial. Murphy mencionó que, “en el pasado, la IA se consideraba una de las muchas aplicaciones dentro de la nube, pero su importancia y, por lo tanto, las oportunidades asociadas han aumentado de manera significativa”. 

El optimismo por estos resultados parece haber sido contagiado incluso por más empresas. Alphabet, Microsoft, Amazon, entre otras, también son un ejemplo de ello. Después de que Microsoft, compañía encabezada por Satya Nadella, reafirmara su apuesta en este sector a través de un acuerdo plurianual de 10 mil millones de dólares de inversión en la tecnología de OpenAI, Microsoft reportó un buen inicio de año al término de su primer trimestre de 2023 impulsado por el crecimiento de su negocio en la nube y la Inteligencia Artificial generativa. Esta vertical de negocio ha experimentado un aumento en ingresos y popularidad desde la inversión en OpenAI. Según el informe trimestral más reciente, Microsoft registró ingresos de $52,900 millones, lo que representa un aumento del 10% en comparación con el mismo período del año anterior. 

Pero puede que no todo sea miel sobre hojuelas. Ante esta situación, surge la pregunta de qué sucederá cuando este ciclo de altas expectativas en torno a la inteligencia artificial llegue a su fin. Peter Tchir, consultor en Academy Securities citado por Bloomberg, considera que “la situación tiene sentido y, aunque no se esté expandiendo a otras empresas, creo que los inversores simplemente están siendo selectivos de manera racional y apostando por aquellas empresas que están invirtiendo en IA”.

Aunque también hay perspectivas un poco menos optimistas. Michael Mullaney, director de investigación global en Boston Partners, piensa que la “concentración de buenos resultados” puede resultar peligrosa. Y al mismo tiempo, persisten las preocupaciones sobre una desaceleración económica, a pesar del entusiasmo por la IA. 

Steve Blitz, economista jefe de TS Lombard citado por CBNC, cree que Estados Unidos se dirige a una recesión. “La reacción desequilibrada del mercado sirvió como recordatorio de una economía estratificada en la que los beneficios tecnológicos tienden a expandirse lentamente”.

Por su parte, Peter Boockvar, director de inversiones de Bleakley Advisory Group, señaló que “los efectos indirectos y los beneficios que el resto de la economía obtendrá de la IA serán un proceso que tomará varios años y décadas”. Se pregunta si la IA es un factor incremental para el crecimiento o si está desviando el gasto de otras áreas, ya que aparte del gasto en viajes, ocio y restaurantes, otras partes de la economía no están mostrando un rendimiento tan sólido, esto para las empresas que no son precisamente gigantes tecnológicos. 

Además, la IA no ha sido beneficiosa para todas las empresas. DataTrek Research analizó nueve grandes empresas relacionadas con la IA que salieron al mercado a través de ofertas públicas iniciales en los últimos tres años y descubrió que su valoración colectiva ha disminuido en un 74% desde sus niveles iniciales. Aunque estas empresas han experimentado un aumento promedio del 41% en sus acciones en 2023, las siete principales empresas tecnológicas, incluida Nvidia, han experimentado un aumento promedio del 58%, según datos de la firma. 

Nicholas Colas, cofundador de DataTrek, cree que las grandes empresas tecnológicas se beneficiarán más del auge de la IA debido a su escala global y ventajas competitivas. Esto podría hacer que estas empresas sean aún más grandes y sistemáticamente más importantes, en lugar de permitir que los recién llegados jueguen el papel de innovadores disruptivos.

Aunque la inteligencia artificial se está convirtiendo en un factor determinante en la vida cotidiana de prácticamente todos, desde compras personalizadas y automóviles autónomos hasta aplicaciones en robótica para el cuidado de la salud, juegos y finanzas, el mundo aún espera ver las consecuencias de un tecnología que apenas nace, sin embargo, los gigantes tecnológicos pueden probar sus mieles en el presente, mientras que el futuro determinará si el éxito fue momentáneo.