BMW y Toyota aumentaron su producción a pesar de los paros por escasez de gas
La fabricación de vehículos tuvo un mes crítico en febrero debido al desabasto de gas natural que obligó a suspender actividades en plantas de ensamblaje alrededor del país.
La industria automotriz se recuperaba lentamente de los golpes sufridos durante la pandemia cuando una tormenta de nieve azotó Texas y provocó escasez de gas natural tanto para el país vecino como para México. Las cifras que publicó el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), dan cuenta que en febrero la producción total de vehículos ligeros tuvo una caída del 28.8 por ciento.
Las únicas marcas que registraron cifras positivas fueron BMW con un crecimiento del 16 por ciento y Toyota con un incremento de 11.8 por ciento, en comparación con febrero de 2020, a pesar de que ambas empresas suspendieron actividades para ajustarse a las recomendaciones emitidas por las autoridades sobre el desabasto de gas que es utilizado para la generación de energía eléctrica en México.
La empresa alemana BMW cerró febrero de 2021 con 5,636 unidades producidas, según datos del Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros (RAIAVL) publicado por el Inegi. La automotriz anunció una reprogramación en su sistema de producción para “enfrentar los desafíos actuales” en la planta de San Luís Potosí que reanudó sus actividades tras regularizarse el suministro de gas.
A pesar del paro técnico en las plantas de Guanajuato y Baja California, la japonesa Toyota logró producir 17,157 unidades que marca una tendencia de recuperación para la marca.
La caída en la producción total de automóviles representó una diferencia de 96,840 unidades en comparación con el mismo periodo del año pasado cuando se alcanzó un total de 335,708 unidades.
En febrero, ante la suspensión de actividades, dirigentes de la industria expresaron su preocupación por medio de una carta dirigida al presidente Andrés Manuel López Obrador. La misiva mostró la importancia del sector al generar 18.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) manufacturero del país, añadiendo que la balanza comercial es superior a los 77,000 millones de dólares "más que el sector petrolífero, los ingresos por remesas y la balanza turística, juntos", informaron en la carta.
Continúan los desafíos para la industria
La industria automotriz seguirá enfrentando retos, uno de ellos es la escasez de semiconductores que se ha desencadenado en los últimos meses. Se estima que la falta de chips impactará a la industria automotriz en 96,845 unidades, de los 85 millones de vehículos pronosticados para este año a nivel mundial, dijo Óscar Albín, presidente de la Industria Nacional de Autopartes (INA) en conferencia de prensa.
Fabricantes como Samsung apuntan a la construcción de fábricas de semiconductores para abastecer al creciente mercado americano. El gigante surcoreano destinará 17,000 millones de dólares en una planta ubicada en el estado de Texas, según Bloomberg.
En enero la producción de automóviles disminuyó un 15.05 por ciento debido a la escasez de chips fabricados en Taiwán y Corea, según dirigentes del sector.
La demanda de productos tecnológicos como celulares y pantallas provocó el desabasto de los semiconductores a nivel mundial, de igual forma los fabricantes han dado mayor preferencia a empresas de tecnología avanzada puesto que es un negocio más redituable.