Automotrices sacrifican tecnologías frente a la crisis de semiconductores
Los compradores tendrán que esperar para gozar de las novedades de la industria automotriz, pues la escasez mundial de semiconductores está obligando a los productores a la sencillez tecnológica.
Hoy en día los chips o microprocesadores están presentes en prácticamente todos los vehículos modernos que cuentan con sistemas automatizados, desde pantallas interactivas hasta cuadros de instrumentos digitales compuestos de varias pantallas.
Esto ha causado que lo que hace unos años era un lujo en un automóvil, ahora se ha convertido en una pieza esencial para su funcionamiento. Sin embargo, algunas empresas están prescindiendo de ellos en la fabricación de ciertos modelos, optando por sistemas analógicos, o incluso priorizar la producción de los modelos más sencillos y sin tantos elementos electrónicos.
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) respondió vía correo electrónico que, además de los paros técnicos, en algunos casos las empresas han dejado de incluir “amenidades para usar esos chips en la producción de la mayor cantidad posible de vehículos completos”. Sin embargo, la asociación no tiene un registro claro de qué acciones precisas ha tomado cada armadora.
Stellantis, el conglomerado que incluye a Citroën, Peugeot, Jeep y Chrysler que también se ha visto afectado por la escasez de microchips, señaló que cambiarían los velocímetros digitales en los nuevos modelos Peugeot 308 a unidades analógicas tradicionales, por lo menos para las unidades producidas en este año en su planta francesa. La japonesa Suzuki también adoptó una estrategia similar para sus tres modelos más populares en el país -Swift, Ertiga e Ignis- que serán producidos con equipo analógico con un precio 3% más barato. Los directivos de General Motors, Nissan y Volkswagen -las más afectadas por la crisis- no respondieron a la pregunta de si tenían en sus planes realizar modificaciones de este tipo a sus modelos en producción.
La crisis de semiconductores ha obligado a diferir líneas de producción automotrices. Se ha dejando de producir intermitentemente camionetas ligeras como la Blazer de GM, fabricada en Ramos Arizpe, o los modelos Tiguan y Taos de VW, producidos en Puebla, con mayor frecuencia que en las líneas de armado de autos más pequeños.
Otro cambio dado a conocer en este año fue el anuncio del cierre de la línea uno de la planta de Nissan en la Ciudad Industrial del Valle de Cuernavaca (CIVAC) donde se producían las camionetas NV cargo y NV para pasajeros hasta julio, así como el famoso Nissan Versa. La compañía ha negado que su decisión esté motivada por la crisis de los semiconductores.
También Honda sorprendió en las últimas semanas al anunciar que retomaría las exportaciones de motocicletas a los Estados Unidos, algo que no hacía desde el año 2008. Si bien la empresa no ha relacionado este nuevo proyecto con la escasez de semiconductores directamente, sí ha declarado que la crisis logística en las rutas Asia-América es la oportunidad perfecta para ampliar la producción de su planta en El Salto, Jalisco, de lo local al mercado de exportación norteamericano.
Postergan lanzamientos de modelos más modernos
Los modelos que más utilizan chips, comúnmente los eléctricos, no han podido adoptar estas estrategias y han tenido que retrasar su lanzamiento.
Stellantis ha tenido que posponer el lanzamiento del SUV Maserati Grecale, que estaba previsto para el 16 de noviembre, por lo menos hasta la primavera debido a la escasez de componentes.
El vicepresidente ejecutivo de la compañía japonesa Nissan, Asako Hoshino, anunció que debido a la escasez mundial de semiconductores, el lanzamiento del nuevo modelo SUV eléctrico Ariya, programado originalmente para el verano, se pospuso hasta el invierno sin una fecha específica para el nuevo lanzamiento en Europa y América.
VW tampoco se queda fuera. La empresa alemana ha comenzado a retirar del mercado europeo -donde más ha parado su producción- la versión Pure Performance de su modelo ID.3, para concentrarse en las versiones que más ganancias les genera. No ha sido el único modelo afectado, también ha iniciado el retiro del Golf, de menor potencia, aunque esta versión está disponible para todos los países donde se vende el modelo.
Convenios para producir semiconductores
Algunas compañías no se han quedado de brazos cruzados y están realizando acuerdos con productores de semiconductores para evitar que una crisis así vuelva a golpearlos. Stellantis y Hon Hai Technology Group, mejor conocida como Foxconn, firmaron un memorando de entendimiento no vinculante para crear una asociación que busca diseñar una familia de semiconductores especialmente creados para apoyar a Stellantis y a los clientes de terceros.
“Con Foxconn, nuestro objetivo es crear cuatro nuevas familias de chips que cubrirán más del 80% de nuestras necesidades de semiconductores, lo que ayudará a modernizar significativamente nuestros componentes, reducir la complejidad y simplificar la cadena de suministro. Esto también impulsará nuestra capacidad para innovar y desarrollar productos y servicios a un ritmo más rápido”, dijo Carlos Tavares, CEO de Stellantis.
La estadounidense Ford hizo lo propio al firmar un acuerdo con GlobalFoundries, uno de los mayores fabricantes en el mundo, para elevar su suministro de semiconductores para sus vehículos. Según han informado ambas compañías en un comunicado, el acuerdo contempla una colaboración estratégica en el desarrollo tecnológico y la fabricación de semiconductores.