Urge Banxico a replantear su comunicación, pero desmantelan área
La comunicación de las decisiones de política monetaria del Banco de México (Banxico) ha sido casuística, sin lineamientos acordados, de corto plazo, parcial e incompleta, lejos de formar expectativas en los mercados. Así la definió la subgobernadora Irene Espinosa Cantellano.
La minuta de la reunión de la Junta de Gobierno del banco central del 30 de marzo, que decidió elevar la tasa en 25 puntos base (pb) para llevarla a 11.25%, refleja no solo la postura de la subgobernadora Espinosa (la de mayor antigüedad en la Junta y cuyo periodo concluye en diciembre de 2024), sino también las preocupaciones en ese sentido de la mayoría de sus miembros.
En la minuta, Espinosa Cantellano lanzó una crítica inusual, para la tradición del banco central, sobre la efectividad de la comunicación y de las guías prospectivas sobre la política monetaria que publica la Junta en sus comunicados. Dice la subgobernadoa que la actual guía “refuerza una visión de muy corto plazo, necesariamente parcial e incompleta, que no cumple con el objetivo de coadyuvar a la formación de expectativas para el horizonte en el que opera la política monetaria. Por lo anterior, reitero la necesidad impostergable de evaluar nuestra política de comunicación”.
La 'guía' es una herramienta de comunicación que tiene el banco central sobre la trayectoria futura de la política monetaria a fin de ofrecer certeza e influir en las decisiones de inversionistas y consumidores; ésta se publica cada vez que el banco central da a conocer su decisión de política monetaria.
La postura de Espinosa hizo eco en otros miembros de la Junta de Gobierno. Uno de ellos, no identificado por la minuta, resaltó que “la comunicación es tan importante como las decisiones sobre la tasa de referencia” y refirió “que no puede pasar inadvertido el hecho de que, por segunda ocasión en 18 meses, la decisión de febrero pasado sorprendió al cien por ciento de analistas”. De allí que, planteó, “una evaluación de la política de comunicación, de su cumplimiento y de los resultados obtenidos”.
El subgobernador en cuestión se refirió a lo ocurrido el 9 de febrero pasado cuando Banxico sorprendió a los analistas al anunciar un incremento de 50 pb -el doble de lo anticipado por el consenso- para llevar a la tasa al 11% alcanzando la tasa terminal que se esperaba tan solo unas semanas atrás por el consenso de los analistas, haciendo tambalear los pronósticos sobre cuándo y hasta dónde terminará el actual ciclo de restricción monetaria.
Pero no fue el único caso. Diversos analistas han expresado sus críticas hacia la falta de claridad y prospectiva en la comunicación de las decisiones de la política monetaria del banco central, además de la escasa interacción de la Junta de Gobierno con la comunidad de inversionistas y analistas -y particularmente de la gobernadora Victoria Rodríguez- en una coyuntura compleja y con alta incertidumbre.
"Soy de la idea que Banxico debe transitar a un modelo como el de la Fed, en la que todos los miembros de la Junta deben hablar ya sea en los medios o con inversionistas. Hasta ahora sólo unos cuantos hablan y precisamente la Gobernadora, no ha abierto la puerta para una mayor comunicación. Hay queja constante de los inversionistas sobre ello. Creo que tienen mucho espacio para mejorar", dijo Marco Oviedo, Estratega para América Latina de XP Investments, desde Brasil.
La preocupación de los expertos ante una escasa y errática política de comunicación sobre la política monetaria se ha extendido en los últimos meses. En un sondeo reciente realizado por Arena Pública, los expertos consultados reprobaron el liderazgo de Rodríguez y calificaron con 8 -en una escala de 1 al 10- el desempeño de la Junta de Gobierno.
Joel Virgen, director de Estrategia para Latam en TD Securities en Nueva York, enfatizó que si bien en estos momentos es complicada la comunicación, incluyendo la guía prospectiva de los bancos centrales, hay un "reconocimiento de que la guía prospectiva se vuelve la herramienta más importante de política una vez que se ha alcanzado el nivel de tasa terminal".
Y añade Virgen, "coincido con la subgobernadora Espinosa. El potencial y horizonte de tal guía prospectiva debe ser reevaluado por la mayoría de los miembros de la Junta. Será clave para lograr que la inflación y sus expectativas regresen cerca del objetivo dentro de unos trimestres".
La inquietud entre los miembros de la Junta también ha crecido recientemente. En la última minuta de Banxico, un tercer miembro de la Junta, reiteró -sumándose a los anteriores- que es “relevante que la comunicación conduzca a una mejor comprensión de la función de reacción del banco central para el resto del año, de forma que disminuya la incertidumbre en el mercado sobre la trayectoria esperada de la tasa de interés”. Oviedo coincide en la importancia de dar certeza con una opinión pública "más o menos homogénea de la visión de la Junta en su conjunto. Me parece que todavía tienen trabajo que hacer".
Sin embargo, a pesar de la discusión que se planteó recientemente en la Junta de Gobierno sobre la necesaria efectividad de la comunicación de Banxico hacia la formación de expectativas en los mercados, el área responsable de plantear y ejecutar la estrategia de comunicación del banco central está desmantelada.
15 meses después, aún no se ha designado al director de Vinculación Institucional y Comunicación, cargo que quedó acéfalo desde el 1 de enero de 2022, cuando la gobernadora Victoria Rodríguez asumió su responsabilidad; mientras que la gerencia de Comunicación también continúa vacante.
Ante la notoria ausencia de la gobernadora en la discusión pública nacional e internacional sobre el fenómeno inflacionario y la actuación del banco central, los subgobernadores Jonathan Heath e Irene Espinosa se han convertido en las voces de opinión más frecuentes en medios de comunicación y en eventos académicos y del sector privado. La ley del Banco de México señala expresamente que corresponderá al gobernador "ser el vocero del Banco, pudiendo delegar esta facultad en los Subgobernadores".
Ven cercano techo, pero preocupa subyacente
El nivel de la tasa de interés estaría cerca del máximo en el actual ciclo restrictivo que emprendió Banxico, lo que dependerá de la evolución de la inflación básica o subyacente, de acuerdo con la minuta de la reunión de política monetaria del 30 de marzo.
"Entre los riesgos al alza para la inflación, la mayoría mencionó la persistencia del componente subyacente en niveles elevados. Algunos apuntaron la posibilidad de mayores presiones de costos", se lee en la minuta. Entre estas presiones de costos, en la Junta se discutieron particularmente las presiones de costos laborales.
La desocupación en México se encuentra en niveles históricos mínimos, mientras que los salarios reales se han incrementado. El anexo de la minuta que elaboran los economistas de Banxico muestra la fortaleza del mercado laboral. "A inicios de 2023, tanto la tasa de desocupación nacional como la urbana disminuyeron. Por su parte, con cifras ajustadas por estacionalidad, en febrero la creación de empleo formal afiliado al IMSS continuó presentando una trayectoria creciente", dice el documento.
Así, dos, de los cinco miembros de la Junta, advirtieron sobre "el riesgo inflacionario ante el apretamiento del mercado laboral". Pero también, otros dos miembros "destacaron que, con base en estimaciones realizadas en el Banco de México, no se está observando una espiral precios-salarios". Con todo, la inflación subyacente ha sido resistente y no se ha reducido aún del 8%. En marzo fue de 8.09%, en variación anual, desde el 8.29% de febrero; mientras que la inflación general fue de 6.85% en marzo.
Sin embargo, la exposición de la mayoría de los integrantes de la Junta revela que ven cercana la tasa terminal, si acaso con un incremento adicional de 25 pb en la próxima reunión de mayo, en concordancia con la mediana del consenso de analistas de la encuesta Citibanamex.
Uno de los miembros de la Junta dijo -según la minuta- que "con base en las previsiones, puede retirarse la mención sobre aumentos futuros, enfatizando que las decisiones dependerán de la evolución de los determinantes de la inflación". Otro más, señaló que "el contexto actual brinda la oportunidad de desacelerar el ritmo de aumento de la tasa de referencia y considerar la posibilidad de alcanzar la tasa terminal del ciclo actual de tasas". Mientras que un tercero argumentó con la posibilidad de mantener el nivel actual de 11.25%. Dijo que "en ausencia de nuevos choques, hacia delante sería conveniente mantener la postura que se alcanzaría con esta decisión (del 30 de marzo)".
La próxima decisión de Banxico sobre la tasa objetivo será el 18 de mayo, por lo que el dato de la inflación subyacente de abril, que se da a conocer el 9 de mayo, será determinante; así como la decisión de la Reserva Federal el próximo 3 de mayo.