Mientras se investiga a Duarte y Borge, las finanzas estatales siguen vulnerables a más desfalcos

Sin importar que el secretario de Hacienda asegure que la federación no saldrá al rescate de los estados desfalcados, de algún lado tienen que salir los recursos para resarcir los recursos para municipios, universidades, sistemas de pensiones, proveedores, entre otros.
16 Enero, 2017 Actualizado el 18 de Enero, a las 14:18
Que los recursos estatales descansen sobre transferencias federales y un débil marco de transparencia y de rendición de cuentas ocasiona que gobernadores se sirvan con la cuchara grande.
Que los recursos estatales descansen sobre transferencias federales y un débil marco de transparencia y de rendición de cuentas ocasiona que gobernadores se sirvan con la cuchara grande.
Arena Pública

Confiar en su palabra ya no es una opción.

Las promesas de justicia contra sus antecesores impulsaron las candidaturas de los gobernadores de Veracruz, Miguel Ángel Yunes; de Chihuahua, Javier Corral y de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, pero sus dichos son endebles puesto que los ciudadanos continúan sin escudos que protejan a sus estados de otro desfalco.

El actual diseño del Sistema Nacional de Coordinación Fiscal entre los estados y la secretaría de Hacienda posibilita que los gobernadores omitan rendir cuentas a los ciudadanos y fue el marco para que ex mandatarios como Cesar Duarte, Javier Duarte y Roberto Borge desviaran fondos públicos, explica Eduardo Revilla, abogado fiscalista.

Los representantes del "nuevo PRI" que en 2012 el Presiente Enrique Peña describió como “parte del proceso de renovación del partido” supieron aprovechar bien la opacidad del viejo Sistema de Coordinación Fiscal y hoy son el mejor ejemplo de la facilidad con que los dirigentes estatales pueden inflar sus bolsillos con cargo al erario público.

Acusado de lavado de dinero y delincuencia organizada, el ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, no escatimó en desviar al menos 500 millones de pesos por medio de empresas fantasmas para la compra de terrenos en México y Estados Unidos, entre otros propósitos. El prófugo de la justicia dejó al estado con una deuda estimada en 87 mil millones de pesos. A la fecha la Procuraduría General de la República ha recuperado 172 millones para el estado.

El ex gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, dejó al estado con una deuda estimada en 22 mil millones de pesos. Hasta el momento no se le ha dictado orden de aprehensión, pero continúan sumándose denuncias en su contra y la de sus prestanombres por delitos como peculado, enriquecimiento ilícito y despojo de bienes a ejidatarios, particulares y empresarios.

Con una deuda de 55 mil millones de pesos el ex gobernador de Chihuahua César Duarte entregó al estado. Al igual que en los casos de Veracruz y Quintana Roo, se estima que desvió 2 mil millones de pesos a través de empresas fantasma.

Rescates por corrupción

Sin importar que el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade, asegure que la federación no saldrá al rescate de los estados, los recursos para resarcir el desfalco de los ex gobernadores de Veracruz, Chihuahua y Quintana Roo a municipios, universidades, sistemas de pensiones y proveedores, entre otros, tendrá que venir de las arcas públicas.

Con los recursos extra que la Hacienda destine para resarcir los desfalcos México habrá de inaugurar “el rescate financiero por corrupción” -un concepto acuñado por el economista Fausto Hernández Trillo- no por sobre endeudamiento o indisciplina fiscal, como sucede en otras partes del mundo.

Es muy temprano para apresurar un diagnóstico respecto a cómo se llegó al "rescate por corrupción," pero preliminarmente la hipótesis sería que ello se ha estado dando a partir del inicio de la descentralización del gasto público, asegura el economista.

Los gobernadores tienen asegurado el ingreso de participaciones y aportaciones del presupuesto federal, ello evita que hagan algún esfuerzo recaudatorio, y al haber un débil marco de transparencia y rendición de cuentas pueden servirse con la cuchara grande, explica.

Por Ley la secretaría de Hacienda transfiere el 20% de la Recaudación Federal Participable a los estados para su libre uso bajo el nombre de Participaciones, fondos creados con la recaudación de impuestos y los derechos sobre la extracción de petróleo y minería. En 2015 el monto distribuido fue de casi 480 mil millones de pesos.

Además, cada entidad recibe un monto de Aportaciones estipuladas en el Presupuesto de Egresos de la Federación que van en aumento. Para 2017 los recursos por esa vía se incrementaron un promedio de 5% anual, pero las aportaciones que recibirán algunos de los estados desfalcados será superior al promedio nacional.

Las aportaciones para Veracruz, antes gobernado por Javier Duarte de Ochoa, crecieron 7.7% anual en 2017, pasaron de 44,713 millones de pesos en 2016 a 48,165 millones en 2017.

El estado gobernado antes por Cesar Duarte, Chihuahua, registró un incremento de 4% en aportaciones con 18,020 millones de pesos en 2016 y 18,745 millones en 2017.

Quintana Roo, antes gobernado por Roberto Borge registró un aumento de 7.4%, pasando de 8,323 millones de pesos en 2016 a 8,941 millones en 2017.

Para Fausto Hernández una solución podría ser la creación de un nuevo pacto fiscal federal en el que la ciudadanía sea copartícipe de la recaudación, pues de esa manera tanto el gobernador como los ciudadanos estarían sujetos a la rendición de cuentas.

“No es suficiente decir los voy a integrar al Sistema Nacional Anticorrupción […] Hay que cambiar el Sistema Nacional de Coordinación Fiscal, eso significa redefinir potestades tributarias y responsabilidades de cada orden de gobierno,” asevera, pero confiesa que no lo ve sencillo.

Mientras tanto los recursos públicos que llegan a los estados para la construcción de obra pública, hospitales, escuelas, seguirán vulnerables a merced de la aparición de nuevos Duartes o Borges.

 

A FONDO: Presupuesto de egresos de la federación, SHCP, 2017.

A FONDO: Presupuesto de egresos de la federación, SHCP, 2016.

OPINIÓN: Trajedia fiscal, Eduardo Revilla, 6 de diciembre de 2016. 

OPINIÓN: Rescate financiero a Estados: El llamado a un nuevo pacto fiscal, Fausto Hernández, 7 de noviembre de 2016. 

OPINIÓN: El ADN de la corrupción, Benjamín Orozco, 5 de enero de 2017. 

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