Estanflación y política monetaria

Un error del Banco de México en la calibración de la política monetaria podría materializar el riesgo de estanflación y entorpecer, más adelante, el cumplimiento de la meta de inflación.
11 Junio, 2025
Inflación al alza.
Inflación al alza.

¿Qué es lo que puede y debería hacer la Junta de Gobierno del Banco de México ante un problema de estanflación?

Cuando hablamos de estanflación nos referimos a una situación inusual: la economía está muy débil, estancada, pero aún así la inflación es elevada.

Lo normal es que un bajo desempleo vaya acompañado de un crecimiento más rápido en los salarios. Es decir, si la economía está fuerte y, como reflejo, el mercado laboral, la inflación es mayor. En cambio, si la economía está débil, sin crecer, el desempleo aumenta y los consumidores reducen su gasto de consumo, pues hay menos dinero que gastar; ante una menor demanda de bienes y servicios, la inflación desciende. Así, existe una relación inversa entre desempleo e inflación (curva de Phillips tradicional).

Sin embargo, históricamente se han presentado situaciones atípicas en donde, pese a la debilidad económica, los precios de los bienes y servicios se mantienen al alza. Estos episodios de estanflación, inusuales y problemáticos, dificultan sobremanera el quehacer de los bancos centrales, al romperse la relación normal entre desempleo e inflación.

El término estanflación surgió a principios de los años setenta del siglo pasado, cuando la crisis petrolera provocó que el crecimiento económico se estancara y se combinara con alta inflación. Esto es, el rompimiento de la curva de Phillips fue provocado por un choque de oferta. Lo mismo podría estar ocurriendo con el impacto de los aranceles, al menos por algún tiempo.

El problema inicial es establecer si, en efecto, se está o no en estanflación. El nulo crecimiento y el deterioro en el mercado laboral son claramente síntomas de estancamiento, pero no existe un umbral exacto de inflación que defina de manera automática una situación de estanflación, pues todo depende del contexto económico de cada país. 

Un punto de referencia obligado es la meta específica de inflación de cada banco central. Si la inflación en términos anuales se ubica arriba de dicha meta de manera persistente, e incluso se aleja de ella, siendo que la economía registra crecimiento nulo, se podría estar hablando de estanflación.

Específicamente para el caso de México, en 2025 se espera crecimiento económico cercano a cero, aunque no se descarta una ligera caída, y la inflación anual en el mes de mayo se ubicó en 4.42%, para superar la meta puntual de 3% y el límite superior del rango de tolerancia de un punto porcentual. Es probable que la inflación continúe presionada y concluya este año en un nivel cercano al 5%. El riesgo de estanflación es elevado.

El mandato del Banco de México es único: mantener una inflación baja y estable. Para contener el alza en los precios es necesario una postura monetaria restrictiva. Es cierto que esto es el caso, dado los parámetros establecidos (el rango neutral estimado es una tasa de interés real de entre 1.8 y 3.6% y la tasa real actual ex ante es 4.2%), pero continuar relajando la postura con ajustes de 50 puntos base, como se induce de las minutas del anuncio de política monetaria del pasado 15 de mayo, podría ser contraproducente, pues la inflación podría ser mayor.

Aunque las decisiones de política monetaria operan con un rezago considerable, cercano a dos años, lo conveniente es ser prudentes. Incluso, plantear una pausa en el anuncio de política monetaria del próximo 26 de junio. Un error en la calibración podría materializar el riesgo de estanflación y entorpecer, más adelante, el cumplimiento de la meta de inflación.

¿Qué es lo que han hecho otros bancos centrales? En 1980, la Reserva Federal, dirigida por Paul Volcker, aumentó dramáticamente la tasa de fondos federales, a un nivel de 21%, provocando una recesión para contener la inflación, que en ese momento era del 13%. Para 1982, la inflación había bajado al 4%. Este episodio se puede considerar un caso extremo y, en la actualidad, la probabilidad de ocurrencia es casi nula, pero ilustra la preocupación y dificultad para salir de una situación de estanflación, la cual es inusual y relativamente nueva en la historia económica reciente.

Paul Volcker (“The Triumph of Central Banking”, September 1990) resumió las lecciones de su actuar: uno, una inflación moderada es fundamental para una economía estable y saludable; dos, los bancos centrales deben mantener la inflación baja, si quieren conservar su credibilidad y las expectativas de inflación bien ancladas; y, tres, la credibilidad de los bancos centrales se logra con un grado razonable de independencia de las presiones políticas de corto plazo.

Estos principios continúan siendo válidos. Los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México deben tenerlos presentes.

Víctor Ceja Víctor Ceja Economista independiente con más de 35 años de experiencia en el ámbito económico y bursátil. Especialista en análisis y planeación financiera y económica, planeación estratégica, análisis financiero empresarial y estudios sectoriales. Licenciado en Economía por la UAM, con estudios de posgrado en Economía en la Universidad de Colorado en Boulder, Estados Unidos, y la Universidad de Cambridge, Inglaterra.