Dell se suma a la independencia de fabricantes chinos
Cada vez más gigantes tecnológicos estadounidenses se unen en la guerra contra China. Dell, tercer fabricante de computadoras en el mundo, solicitó a sus proveedores disminuir la cantidad de piezas utilizadas para el ensamble de las computadoras, incluso de empresas no chinas, pero que tienen sus operaciones dentro de este país, según información citada por Nikkei Asia.
Después de que la administración de Joe Biden impuso nuevos controles de exportación para fabricantes de semiconductores chinos, entre ellas Yangtze Memory Technologies Corp (YMTC) y 21 compañías más, las empresas norteamericanas han buscado ampliar las opciones en su cadena de suministro, apuntando a países fuera de China, como Vietnam.
El objetivo de Dell es reducir gradualmente el uso de los componentes producidos en China para el 2024. Así, todos los chips, módulos electrónicos y placas de circuitos de impresión que utilicen en sus productos estarán fabricados en talleres que no tengan relación con este país asiatico.
Estimaciones de SEMI proyectan que a nivel mundial se invertirán 500 mil millones de dólares en nuevas fábricas que podrán iniciar actividades entre 2023 y 2024 (Imagen: pexels.com)
Fuentes con conocimiento del asunto advirtieron que si los proveedores no toman acciones para alcanzar esta meta “eventualmente podrían perder pedidos de Dell”, comentarios publicados en Nikkei Asia.
Para lograr sus objetivos las empresas estadounidenses podrán desplazarse hasta Taiwán, Japón, el sudeste asiático y Europa, pues en estos territorios se construirán, al menos, 37 fábricas que podría iniciar sus actividades en 2023, según estimaciones compartidas en el informe World Fab Forecast publicado por SEMI, una asociación global de fabricación y diseño de productos electrónicos con más de dos mil 500 miembros.
Además, en Estados Unidos, que espera competir contra China, SEMI estimó que se podrían construir 18 instalaciones. Todas estas plantas permitirán diversificar la cadena de suministro y mantener o reducir los costos de producción de las empresas norteamericanas que en la última década delegaron sus tareas de ensamblaje y fabricación a China.
Aunque, de manera individual, China construirá la mayor cantidad de plantas para la fabricación de semiconductores, ya que cuenta con 20 proyectos planificados. A pesar de las crecientes tensiones entre los gobiernos y regulaciones para debilitar al campo manufacturero en China.
La compañía HP, rival de Dell, ha buscado las mismas alternativas en el mercado, pues en conjunto con los proveedores evalúan las posibilidades de trasladar la producción a otros países, pero las fuentes consultadas no drindaron detalles sobre los avances en la estrategia de la empresa.
