Conformación de Órganos de Gobierno de Banca Central: El caso de Banxico

Preocupa más que la falta de experiencia financiera, la carencia de un macroeconomista en la Junta de Banxico que mire el mediano y largo plazo y que entienda la dinámica de largo plazo.
26 Enero, 2023

Muchos países tienen como una costumbre o regla escrita, o no, incluir en la Junta de Gobierno de su banco central a una persona versada en temas de macroeconomía (eso, macroeconomía, que incluye economía monetaria y fiscal).

En general la o el susodicho provienen del medio académico de su país y ganan su prestigio por medio de la escritura de artículos científicos y publicados en las revistas especializadas más prestigiosas del orbe. En el caso americano por ahí han desfilado, entre muchos, Janet Yellen, Ben Bernanke, Friedrerik Mishkin y Alan Blinder, entre muchos otros.

Asimismo, en otros lados del mundo incluso está como regla escrita que debe haber un académico en el órgano de gobierno de los bancos centrales. Hemos visto a Jacob Frenkel o Stanley Fisher dirigir al banco de Israel, a Raghuram Rajan al de la India, a Mervin King en el de Inglaterra, y un largo etcétera.

La pregunta es ¿por qué se dan esas incursiones de académicos en los órganos de gobierno del mundo? Se tiene antes que decir que el número de miembros de esos órganos varía de país a país, pero las decisiones sobre la política monetaria son colegiadas. Para una mejor toma de decisiones la composición de los órganos de gobierno intenta guardar un equilibrio entre tres tipos de perfiles: 1) personas que conozcan a fondo el sector financiero; 2) personas que dominen la macroeconomía; y, 3) abogados financieros que conozcan la legislación del área.

Como se aprecia, solo hablo de perfiles y no de personas. La mayor parte de los bancos centrales buscan ese equilibrio de los tres perfiles señalados arriba. En adición, para una mejor toma de decisiones la mayor parte de los miembros de los órganos de gobierno se conforman con más de 5 posiciones. La Fed tiene 7 miembros, el Banco de Inglaterra cuenta con 5 miembros ejecutivos con 7 miembros no-ejecutivos que intervienen con su voto en las reuniones; el Banco de Canadá tienen 12 miembros independientes; el Bundesbank tiene 4 miembros más el presidente y el vice-presidente que totalizan 6 lugares. Esto permite contar con representantes de los tres perfiles señalados arriba (financieros, macroeconomistas y abogados).

México cuenta con 5 miembros de la Junta de Gobierno, lo que restringe mucho que se pueda contar con los tres tipos de perfil. Otros órganos autónomos fueron diseñados con más miembros en sus Consejos. El Instituto Nacional Electoral cuenta con 11 comisionados, la Comisión Federal de Competencia, la Comisión Reguladora de Energía y el Instituto Federal de Telecomunicaciones conforman cada una su pleno con 7 comisionados.

Reitero, la institución con menos miembros en su órgano de gobierno es el Banco de México (Banxico), lo que dificulta el equilibrio entre los tres tipos de perfil. No hay una explicación en la literatura de porqué la política monetaria del país está tan concentrada en tan pocas personas. Conozco anécdotas al respecto de funcionarios anteriores, pero ninguna confirmada.

Pero aún con un número tan reducido de miembros de la Junta de Gobierno, la ley establece de manera indirecta que 3 de ellos deben provenir del sector financiero y dos con antecedentes y conocimiento de política macroeconómica. Deja la puerta abierta también a que alguno sea abogado como ya ha sucedido en el pasado en el Banxico.

Dicho esto, la actual Junta del Banxico ha sido sometida a cierto escrutinio. Diversos periódicos como Reforma, El Financiero, El Economista y portales como Arena Pública han expresado preocupación por la falta de experiencia en materia financiera del actual órgano de gobierno. Curiosamente, la mayor parte de los entrevistados por esos medios reparan en la carencia de experiencia en dicho sector. Ninguno de ellos repara en la carencia de un macroeconomista sólido en la Junta.

Más aún, si uno examina cómo es que los 5 miembros reunieron los requisitos de ley y los argumentos por las que fueron aprobados en el Senado, todo se decanta en su experiencia financiera (más allá que algunos cuestionan si haber sido funcionario de Hacienda en el área de egresos, sector no tan cercano a las finanzas, es válido como experiencia financiera).

Estrictamente, ahora en la Junta hay 5 miembros que fueron aprobados por reunir los requisitos con el perfil financiero, de acuerdo con el Senado, y curiosamente cuatro de ellos provienen de trabajar en Constituyentes 1001, avenida alejada de Santa Fe y Reforma Centro, sedes del sistema financiero del país. El quinto es un economista que sirvió a los mercados financieros mediante análisis de coyuntura (para comprender la función de los economistas de mercados, ver https://bit.ly/3JhTQZw).

Con la salida de Gerardo Esquivel no existe ya un miembro que mire la macro de manera más de largo plazo. Tradicionalmente los financieros miran la macro como una señal para tomar decisiones de inversión en el corto o muy corto plazo. Repito, los actuales miembros cumplieron sus requisitos en este sentido.

Personalmente me preocupa más la carencia de un macroeconomista que mire el mediano y largo plazo y que entienda la dinámica de largo plazo. En el pasado, al menos uno de los miembros contaba con esa experiencia, por haber laborado en el área macro del propio Banxico o por haber laborado en el área de planeación financiera de la SHCP; o bien, como un único caso en la historia del Banxico, Gerardo Esquivel, por haber investigado al respecto. Esto independiente a si los pasados eran los idóneos o no.

Volviendo a los académicos mencionados arriba, Alan Blinder escribió al terminar su periodo en la Fed un libro intitulado Banca Central: Teoría y Práctica, en el que resalta la importancia de conocer e interpretar bien los modelos macroeconómicos sofisticados que realizan los macroeconomistas de la propia Fed. “No tomo la decisión conforme al modelo, sino que me sirven de insumos para tomarla”, afirma en ese libro. Y recomienda a los estudiantes de economía que estudien y entiendan bien los modelos macroeconómicos dinámicos.

Acá es donde estriba mi preocupación. En esta ocasión (puedo estar equivocado, ojalá) por sus CVs no veo esa característica. Si los financieros están preocupados (y eso que en principio los 5 miembros justificaron sus requisitos por haber laborado en el sector financiero), pues los macroeconomistas estamos un poco más que ellos.

El presidente López Obrador declaró que le dejó la elección al secretario de Hacienda, para el nombramiento más reciente. Si esto es cierto, la obligación de la reflexión para diseñar la Junta de Gobierno acorde a los estándares idóneos le correspondió al secretario Ramírez. Su decisión no fue la acertada pues no reparó en los equilibrios de los perfiles. Tuvo la oportunidad de nombrar a alguien que nivelara la composición de la Junta de Gobierno. Era suya……y la dejó ir.

Fausto Hernández Trillo Fausto Hernández Trillo Investigador y académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE). Experto en finanzas públicas, macroeconomía y sistema financiero. Investigador Nacional Nivel III. Doctor en Economía por la Universidad Estatal de Ohio, EU, y profesor visitante en universidades de México y Estados Unidos. Autor de 3 libros y de decenas de artículos académicos. Conferencista y consultor de organismos internacionales y del gobierno mexicano y galardonado con el Premio de Economía Latinoamericana "Daniel Cosío Villegas".