Herramientas de diseño y fotografía apuestan por la creación automática con IA

La preocupación por el uso de la IA en la fotografía ha llevado a diversos fotógrafos a cuestionarse sobre el impacto que puede tener esta tecnología en la toma y edición de imágenes
1 Junio, 2023 Actualizado el 1 de Junio, a las 20:24
Imagen creada por Adobe Firefly
Imagen creada por Adobe Firefly
Arena Pública

La inteligencia artificial cada día llega a nuevos sectores y la fotografía es una de ellas. Recientemente, se han viralizado imágenes creadas por software de IA, programas de edición que permiten modificar imágenes y hasta complementar una fotografía dependiendo de lo que el usuario pida. 

Durante la semana pasada, la reportera Joanna Stern, del Wall Street Journal, publicó un artículo donde ponía en duda si la realidad estaba rota con la llegada de la IA, además de señalar que Adobe Firefly y Midjourney lideran la “loca revolución del software fotográfico de la IA”.

“Nos dirigimos a un momento en el que no podremos saber qué tan manipulada está una foto, qué partes son reales o falsas”, declaró. 

Las declaraciones de Stern se dan en medio del gran auge por aparte de diversas compañías en el desarrollo de nuevos softwares capaces de generar imágenes a partir de texto o modificar fotografías ya existentes. Tan solo, hace unas semanas, la imagen creada por IA del Papa vistiendo una chamarra llamativa y caminando por el vaticano tuvo gran auge en redes sociales, así como diversos debates sobre el impacto de esta nueva tecnología. 

Una de las aplicaciones más destacadas es Midjouney, aplicación que generó las fotografías del Papa. Es un software que cuenta con la capacidad de producir imágenes con solo una breve descripción del texto, además una de sus principales características es que es un laboratorio de investigación independiente autofinanciado y que solo cuenta con 11 empleados a tiempo completo. 

Asimismo, Adobe busca ser un competidor clave en IA con Firefly, una herramienta disponible en Photoshop que permite complementar una fotografía con las peticiones que el usuario pida. La herramienta de Adobe busca ser un modelo de difusión con opciones avanzadas y permite al usuario interactuar con los resultados de Firefly, cambiando color, saturación, contraste, etc. 

Asimismo, Canva, una de las herramientas de diseño con mayor crecimiento en los últimos años, también busca adentrarse como un referente en la IA, al integrar diversas herramientas que emplean esta tecnología para crear nuevos diseños e imágenes desde cero, así como agregar elementos nuevos a imágenes ya existentes. 

La preocupación por el uso de la IA en la fotografía ha llevado a diversos fotógrafos a cuestionarse sobre el impacto que puede tener esta tecnología en la toma y edición de imágenes. Tan solo el mes pasado, el fotógrafo alemán, Boris Eldagsen ganó la categoría abierta creativa del Sony World Photography Award de este año con su obra "Pseudomnesia: The Electrician, sin embargo, declaró que su fotografía fue realizada con inteligencia Artificial y se negó a recibir el premio. 

En declaraciones de Eldagsen, su participación en el concurso buscaba abrir la conversación en torno a este asunto. Además, señaló que con el uso de la inteligencia artificial, el lenguaje fotográfico adquiere una vida propia que se desliga de la fotografía. "Es un error hablar de fotos de IA, porque eso sugiere que se trata de fotografía. Pero las imágenes generadas por medio de la IA no son fotografías", afirmó. 

Foto con la que Boris Eldagsen gano el  Sony World Photography Award.

 

Para llegar a combatir la incertidumbre sobre si una foto es verdadera o creada por IA, Adobe integró a Firefly una "credencial de contenido", información digital integrada en el archivo, que dice que la imagen fue manipulada con IA y ha presionado para que las plataformas de noticias, tecnología y redes sociales utilicen este estándar de código abierto para que todos podamos conocer de donde proviene la imagen. 

Hasta el momento, pocas aplicaciones han integrado algo parecido, sin embargo, la periodista del WSJ destaca que estamos llegando a un punto de inflexión, donde conocer si una foto es creada por la IA o por un ser humano podría depender únicamente de las herramientas que las compañías agreguen, ya que conforme pasan los meses, la IA crea imágenes más hiperrealistas y difíciles de detectar al ojo humano.