Hacer cine con smartphones: ¿Una revolución que ya está aquí?

Después de años de evolución tecnológica, los smartphones podrían abrirse nuevos espacios como herramientas de gran potencial; empresas como iPhone y Samsung ya lo aprovechan.
18 Julio, 2023 Actualizado el 19 de Julio, a las 12:55
Con su capacidad para capturar imágenes de alta calidad y su versatilidad en la experimentación visual, este dispositivo promete abrir nuevas puertas en la producción cinematográfica. (Imagen: Pexels)
Con su capacidad para capturar imágenes de alta calidad y su versatilidad en la experimentación visual, este dispositivo promete abrir nuevas puertas en la producción cinematográfica. (Imagen: Pexels)
Arena Pública

No cabe duda de que la tecnología está alcanzando cada uno de los aspectos de nuestra vida; el cine no es la excepción. El uso de los smartphones está ganando cada vez más relevancia en el panorama cinematográfico, como se evidencia en el desarrollo de esta tendencia. Estas propuestas van más allá de la esfera individual de las cámaras de los teléfonos, y son un indicador del interés que algunos cineastas tienen en esta tecnología.

El más reciente ejemplo fue la apuesta de iPhone, quien se encargó de grabar una pieza de calidad profesional con tomas exclusivamente del iPhone 14 Pro, en “El Huracán Ramírez vs. La Piñata Enchilada”, un cortometraje que tiene como escenario los colores de la Ciudad de México y elementos representativos de nuestro país. 

En casi 14 minutos, el filme dirigido por Tania Verduzo y Adrián Pérez, mejor conocidos como “Los Perez”, describe una icónica pelea retomando una de las figuras más representativas de México: la lucha libre, y los conjunta en una aventura que engloba las más apremiantes y coloridas imágenes. 

Esta breve cinta fue producida en México, y diseñada a partir de los 48 megapíxeles del lente principal, así como 12 megapíxeles del ultra gran angular, además de los teleobjetivos de la cámara del iPhone 14 Pro. Pero si el espectador no supiera que las tomas son producidas por un teléfono celular, esta característica pasaría desapercibida.

Pero iPhone no es la única empresa que ha impulsado el desarrollo de esta tecnología. La utilización de teléfonos móviles en la producción cinematográfica se gestó al menos desde el lanzamiento de SMS Sugar Man, un largometraje sudafriano grabado con un Sony Ericsson W900i. 

Ciertamente, aunque la industria ha sido testigo de las capacidades de los móviles, no existió una verdadera influencia hasta que iPhone presentó Tangerine, en 2015, película que fue aclamada por crítica y público en el Festival de Sundance 2015, y rodada enteramente con tres iPhone 5S, un adaptador anamórfico y una app llamada FiLMiC Pro, reduciendo visiblemente los costos.

Más tarde, en 2017, cuando se estrenaba el iPhone 7 y el iPhone 7 Plus, Apple publicó “Detour”, como una muestra del potencial de su cámara en 4k, además de integrar accesorios que se conectaban al Bluetooth, como micrófonos exteriores.

La empresa también dio un salto en la producción cinematográfica cuando estrenó el iPhone 13 en noviembre del 2021. La compañía proyectó Whodunnit, un corto de poco más de un minuto que exploraba la capacidad de jugar con la profundidad de campo de las tomas, y que del mismo modo, muestra una de las mayores capacidades del iPhone, que es su cámara y procesadores.

Apple tiene ya experiencia en la creación de este tipo de cortometrajes como parte de la publicidad de sus nuevos productos, y aunque esto ya daba lugar a una intención concreta de explorar una nueva manera de hacer cine, la herramienta también ha sido explorada por empresas como Samsung, en la producción de Princess & Peppernose, capturada completamente con el Samsung Galaxy S21 Ultra 5G.

Pero aunque este tipo de producciones son una muestra de la capacidad de la cámara de los dispositivos móviles como parte de su publicidad, también muestra una herramienta que podría ser parte de la industria cinematográfica en general. 

 

¿Smartphone VS cámaras tradicionales?

Muchas de las ventajas que tienen los dispositivos móviles para crear planos y secuencias en el cine, hacen que este proceso sea menos costoso y más práctico. Y aunque podría pensarse que utilizar un teléfono en la producción cinematográfica es una tarea difícil, para Daniel von Damm, director de fotografía de la segunda unidad en la producción del cortometraje "El Huracán Ramírez vs. La Piñata Enchilada”, recientemente lanzado por iPhone, utilizar esta herramienta incluyó muchas más ventajas que desafíos: “Todo el tiempo te das cuenta de que tienes una herramienta muy versátil, muy “aguantadora” para golpes, polvo, agua. Entonces no son desafíos. El teléfono es una herramienta que permite filmar y registrar los planos que tienes pensados con una facilidad y un grado de diversión muy agradables”, compartió. 

Pero además, los teléfonos inteligentes ofrecen la capacidad de capturar imágenes desde lugares y ángulos que los sistemas de cámaras tradicionales simplemente no pueden alcanzar. Con sus cámaras pequeñas, ligeras y fáciles de maniobrar, los teléfonos inteligentes son ideales incluso en espacios reducidos.

Steven Soderbergh demostró este punto con su película "Unsane" en 2018, que marcó su primera incursión en el cine utilizando teléfonos inteligentes. La producción de este thriller se convirtió en un campo de pruebas para la cinematografía lista para usar impulsada por los teléfonos inteligentes.

En un momento clave, Soderbergh y su equipo incluso colocaron la cámara del teléfono dentro del maletero de un automóvil. Esta toma sería prácticamente imposible de lograr con una cámara de cine tradicional, a menos que se esté dispuesto a desmontar partes significativas del vehículo para obtener la imagen deseada.

“Es una herramienta que permite tanto a nuevas generaciones como a las generaciones que ya hacen cosas profesionales, pensar una forma de filmar distinta a cuando tienes una cámara robusta. Por ejemplo, no tienes que estar cambiando lentes. Cuando tienes una cámara robusta puedes tener un lente zoom, no obstante, sigue siendo una cámara robusta y sigue teniendo una dinámica más exigente. A la hora de trabajar con el iPhone, es una herramienta nueva que permite expresarte de una forma que, yo como operador de cámara, no había tenido. Es una herramienta nueva”, opina Daniel.

Incluso durante el primer festival internacional de Londres, la directora Victoria Mapplebeck insistió en la importancia de estos artefactos en la realización del cine: “He sido una directora que filma por su cuenta durante 25 años: mi cámara ha pasado de necesitar una bolsa del tamaño de una maleta pequeña a caber en mi bolsillo trasero”, dijo Mapplebeck.  “Me encanta cómo ha transformado mi enfoque en la realización de películas. Funciona en ambientes íntimos, explota las áreas grises de la informalidad y permite tomas más dinámicas e innovadoras para sacar a la luz historias ocultas y personales”.
 

Una herramienta de contribución, no de sustitución

No puede pasar desapercibido un artefacto cuyo número de usuarios a nivel mundial superó los 6 mil millones en 2021 y se prevé que siga creciendo de forma paulatina durante los próximos años. Pero más allá de sus capacidades de comunicación surge la duda de si los smartphones podrían convertirse en una herramienta de creación artística de vanguardia, además de su capacidad de recolectar imágenes. 

“El Huracán Ramírez vs. La Piñata Enchilada” experimenta con altos contrastes de luz, cambios de enfoque y diversas perspectivas, logrando efectos visuales impresionantes, una característica que los teléfonos móviles no pueden lograr por sí mismos. Para Daniel von Damm, se trató de una experiencia que implicó más que un reto, la exploración de una nueva narrativa.

“El proyecto, la visión de los directores, el planteamiento de las secuencias; todo fue diseñado para poderse filmar con un iPhone. El modo cine da un resultado con un look cinematográfico bastante decente, y muy bueno. Si a eso le sumas que la visión de los directores y la visión del director de fotografía, la manera en la que Alexis Zabe estaba iluminando, te encuentras con una nueva herramienta con la que estás experimentando una nueva narrativa, una nueva forma de poder contar los planos”, dijo en entrevista.   

Con su capacidad para capturar imágenes de alta calidad y su versatilidad en la experimentación visual, este dispositivo promete abrir nuevas puertas en la producción cinematográfica, ofreciendo a los cineastas nuevas formas de contar historias y romper barreras creativas. “Yo tuve la fortuna de realizar uno de los planos de acción en patines, entonces, estar patinando con un teléfono es una experiencia muy agradable”, dice von Damm. 

Pero, ¿podría iPhone, en el futuro, reemplazar a las cámaras tradicionales en el cine? Para Daniel, esto no se trata necesariamente de una sustitución. “Lo que creo es que está sumando a una nueva forma de filmar, a una nueva forma de hacer las cosas. Ninguna de las herramientas que ya existen sustituyen una cosa por otra. Hay directores como Harmony Korine que siguen filmando con una cámara VHS, porque la narrativa y la naturaleza de lo que filman, requiere ese formato. Entonces esta es una nueva herramienta que permite eso, permite explorar nuevas áreas”.

Desde luego que la modernización ha contagiado poco a poco a este sector, no sólo en la manera de grabar, sino en toda la manera de producir y post producir. El cortometraje "El Huracán Ramírez vs la Piñata Enchilada" es solo un ejemplo del potencial innovador del iPhone 14 Pro en la industria del cine. Esta clase de dispositivos están redefiniendo los límites de la creatividad y brindando a los cineastas una herramienta poderosa en la palma de su mano. A medida que los dispositivos móviles continúan evolucionando, se espera que sigan desempeñando un papel importante en la producción cinematográfica, brindando a los cineastas más oportunidades para expresar su creatividad y contar historias de diferente manera.