Desaparición del IFT traería un reordenamiento en la regulación tecnológica: Mauricio Figueroa
Los retos del Estado mexicano en torno a la regulación de las tecnologías emergentes como la Inteligencia Artificial (IA) tienen que ver con la claridad en las funciones de los órganos reguladores.
La futura estrategia del Ejecutivo en torno a la “captura” de órganos autónomos por parte de secretarías y dependencias gubernamentales podría darle “mayor aceite” al Estado mexicano para impulsar la regulación de esta tecnología en aspectos como la protección de datos personales, aprovechando de manera eficaz el reordenamiento, opina Mauricio Figueroa, académico experto en regulación tecnológica y especialista en Inteligencia Artificial.
El especialista, que actualmente se encuentra cursando un doctorado en torno a la evolución e integración de “chatbots sociales” en la Universidad de Newcastle, se muestra optimista. Pese a las críticas en torno a la reforma propuesta por el Ejecutivo, que tampoco descarta, opina que es posible que la futura administración vea por la regulación de acuerdo a la gobernanza de la Ciudad de México.
“Yo esperaría que este reordenamiento trajera una mayor agilidad, comunicación y 'mayor aceite' al Estado mexicano”, dijo para el pódcast Tecnológika, de Arena Pública, al mismo tiempo que discutió las problemáticas en torno a la transversalidad de los diferentes organismos regulatorios como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
Para este último órgano autónomo, el académico lanza una crítica en torno a las funciones que se le adjudican. El experto opina que hay una “exageración” en las facultades del IFT, que considera como preocupante.
“Me atrevo a decir que son una exageración las facultades del IFT, y creo que eso es muy preocupante. He visto un par de documentos donde asumen o piensan que en materia regulatoria de la Inteligencia Artificial, el IFT es el que tiene que estar al centro de la discusión y articular todo el funcionamiento y la política pública de la IA en México, esto me parece que es un error grave”.
El experto opina que al IFT le corresponden temas como espectro radioeléctrico, diferente a temas de sistemas informáticos. Sin embargo, opina que la transversalidad de las aplicaciones de esta tecnología debería incorporarse a cada uno de los diferentes sectores de gobernanza.
Para Figueroa, la nueva Agencia de Transformación Digital que se creará en la nueva administración de la presidenta Claudia Sheinbaum podría fungir como coordinadora de los esfuerzos en regulación de inteligencia artificial.
"A lo que tenemos que apostar en México, es a pensar en un mecanismo más coordinado. Cada autoridad o regulador, dentro de su funcionamiento, cuando haya elementos que tienen que ver con inteligencia artificial, tiene que conocer de esos temas. Y tenemos que crear un mecanismo, algo similar a un mecanismo, algo similar a una comisión intersecretarial, donde se puedan compartir las mejores prácticas y ahí sí invitar a la autoridad en materia de datos personales, en materia de telecomunicaciones, etcétera. ¿Quién encabezaría este mecanismo? Yo creo que podría ser esta Agencia [de transformación digital]. Falta ver qué naturaleza jurídica le van a dar a la agencia. No con la finalidad de ser el regulador central y exclusivo, sino de otorgar asesoramiento técnico a cada uno de los reguladores".
En la entrevista, el ex subdirector del Sistema Nacional de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT), hace un recorrido por los factores que llevan a las conclusiones del futuro de la regulación en México, entre ellos, el entendimiento del tratamiento de datos personales como uno de los próximos retos a regular para la IA en México en el mundo.
El experto dibuja la importancia del tratamiento de datos como un modelo de negocios para las gigantes tecnológicas en lo que explica como un “capitalismo informacional” que debe ser entendido como una lógica económica para mitigar los daños de la misma.
Además, hace referencia a una propuesta de regulación que aborde los daños de los denominados “derechos arco” en México, teniendo en cuenta las problemáticas especiales de la Inteligencia Artificial como las alucinaciones, los datos acumulados, el extractivismo de datos, entre otros, haciendo una comparación con organismos internacionales que van a la delantera, como es la futura Ley de IA , propuesta y evaluada en Europa.
En este sentido y teniendo en cuenta cada particularidad, el experto opina que “la IA es como la electricidad”, transversal y con consecuencias para diferentes áreas, sin embargo, también cree que “reordenar es sensato” en medio del análisis de la coyuntura específica de nuestro país.