La crisis ronda los mercados. El peso y el petróleo se desploman

ACTUALIZACIÓN 12:30 hrs: El dólar se vende en 18.90 pesos en las ventanillas bancarias y el petróleo WTI cae 7.2% y se vende a 26.40 dólares el barril
20 Enero, 2016 Actualizado el 20 de Enero, a las 12:41
La mezcla mexicana de exportación podría rondar los 19 dólares por barril cuando Pemex de a conocer su cálculo
La mezcla mexicana de exportación podría rondar los 19 dólares por barril cuando Pemex de a conocer su cálculo
Arena Pública

La crisis financiera está aquí.

El peso mexicano se ha debilitado más que nunca frente al dólar. El tipo de cambio al mayoreo alcanzó los 18.65 pesos por dólar, mientras que en las ventanillas de los bancos la divisa estadounidense se vende a 18.90 pesos y en algunas casas de cambio el precio alcanza 19 pesos.

Para hacerle frente a la volatilidad, el Banco de México vendió 400 millones de dólares esta mañana. Los últimos 200 millones se vendieron a un tipo de cambio ponderado de 18.6022 pesos por dólar y la demanda en la segunda subasta fue de 765 millones de dólares, Un monto que dice mucho del nerviosismo sobre el tipo de cambio y la posibilidad de que el peso se siga depreciando. 

El petróleo de referencia West Texas Intermediate (WTI) cae 4.67 por ciento, a 27.13 dólares el barril; un precio que, de mantenerse las próximas horas, llevará al precio promedio del petróleo mexicano de exportación a niveles de 19 dólares el barril. Desde abril de 2003 no se había visto un precio tan bajo.

Ambos factores, depreciación acelerada del peso y desplome en los precios petroleros, tendrán efectos severos sobre las finanzas públicas del país, sobre los pronósticos de precios para los siguientes meses y sobre los balances de grandes y medianas empresas de México..

 

Finanzas públicas bajo presión

Las finanzas públicas se ven mucho más presionadas con un precio del petróleo que no para de caer. Si bien la Secretaría de Hacienda ha insistido en que las finanzas del país ya no están petrolizadas, los ingresos por la explotación de hidrocarburos siguen representando una quinta parte de los ingresos totales del país, por lo que el impacto de menores ventas petroleras no es menor, en una política fiscal en la que el gobierno ha prometido no incrementar impuestos, ni aumentar más una deuda que en los últimos años ha crecido a tasas elevadas.

Por otro lado, la persistencia de la fuerte depreciación cambiaria y las expectativas de mayores periodos de volatilidad derivados de la incertidumbre económica y financiera en los grandes países emergentes –situación que ha sido advertida por el propio gobernador del Banco de México- tendrá efectos, tarde o temprano, sobre el crecimiento de los precios internos.

Solo una inflación aún contenida por la baja en los precios de las materias primas y por una demanda aún débil han logrado mantener un nivel de crecimiento de los precios históricamente bajo.

 

Deudas corporativas en la mira

Pero quizá uno de los frentes más preocupantes es la de las deudas corporativas en dólares que podrían impactar severamente el balance de grandes empresas del país.

Ya la constructora ICA –que tiene abultadas deudas en dólares- anunció hoy, por segunda vez en un  mes, que dejará de pagar los intereses de su deuda, lo que “tiró”, una vez más, su acción a un nuevo mínimo histórico. La bancarrota ronda en el cuartel de la que fuera la constructora más grande de México.

Sin embargo ICA no está sola en el crecimiento de su deuda en dólares en momentos en que las tasas de interés eran muy bajas por la abundante liquidez de una política monetaria expansiva en Estados Unidos.
Otras empresas mexicanas también enfrentan altos costos financieros y los analistas esperan que en las próximas semanas se develen nuevos afectados por la depreciación persistente del peso.

La crisis financiera ronda los balances de gobiernos y empresas derivada de un huracán financiero que ha empezado a golpear con toda su fuerza.