La propuesta que llevó Tsipras bajo el brazo no hizo sonreír a los europeos
Tras el rotundo “no” de los griegos en el referéndum del pasado domingo, el gobierno de Tsipras, primer ministro griego, ha acudido a la reunión de los ministros de economía y finanzas de la zona euro este martes sin una nueva propuesta a la expresada la semana pasada.
Grecia, en su intento por reanudar las negociaciones con sus acreedores acerca de la emergencia financiera presentada, tenía previsto presentar una tercera propuesta creíble en la reunión de emergencia de la zona euro celebrada en Bruselas; sin embargo, Alexis Tsipras se presentó este martes sin la esperada propuesta que habría facilitado las cosas y reducido el riesgo en sus bancos.
Los acreedores no pusieron mayores barreras ante el incumplimiento del gobierno griego este martes. En Bruselas, los socios, a regañadientes, estiman que la petición de rescate llegue en las próximas horas; si es así, los acreedores generarán la decisión política necesaria para empezar a negociar esa petición y para que el BCE no desconecte a los bancos de la financiación de emergencia.
Adicional a ello, en Bruselas los acreedores ultiman el diseño definitivo ante la esperada petición griega. Será un programa que combina un plan a corto plazo -seis meses y 15.000 millones, con condiciones y medidas prioritarias para las necesidades financieras inmediatas de Grecia- y otro a medio y largo plazo.
Al respecto, la canciller alemana, Angela Merkel, asumió que la resolución griega debe ser en “cuestión de días, y no de semanas” si Atenas quiere eliminar todos los riesgos de accidente en la banca o incluso una salida del euro. Aunque, con la propuesta de mañana, casi todos los detalles la crisis griega están por decidir.
Tsipras se ha comprometido esta noche a acordar las medidas prioritarias de su propuesta antes de la próxima cumbre del euro, prevista para el próximo domingo.
Grecia presentará la citada propuesta al mecanismo de rescate europeo (Mede) por un periodo de entre dos y tres años, con las adaptaciones necesarias tras el referéndum y con el objetivo de responder a las necesidades de liquidez de urgencia, explicaron fuentes del gobierno griego a la agencia Reuters.
Tsipras, según agencia Reuters, apunta a que las adaptaciones podrían llegar en el área de privatizaciones o con reformas en los mercados de productos y servicios, a la vista de que Atenas no quiere una reforma de pensiones más radical.
Mientras tanto, el cierre de los bancos griegos se prolongaría hasta el jueves y los retiros de dinero seguirán limitados a 60 euros por día. La bolsa de Atenas estará cerrada mañana para evitar especulación financiera.
