Yáñez ya planeaba la venta de Oceanografía

Para Banamex-Citibank, que aquí encabeza Javier Arrigunaga, el caso de Oceanografía representaría ya el segundo descalabro de importancia en el último año. El primero fue el de los créditos comprometidos con compañías del sector de la vivienda.
3 Marzo, 2014 Actualizado el 3 de Marzo, a las 10:16
¿Se equivocaron las calificadoras de las emisiones de bonos de la empresa cuya principal línea de negocio es ser contratista de Pemex?
¿Se equivocaron las calificadoras de las emisiones de bonos de la empresa cuya principal línea de negocio es ser contratista de Pemex?
Arena Pública

No obstante, el caso de la firma fundada en Campeche tendría que ser más grave porque involucraría una falla sistémica en muchos candados que, hasta ahora, se daban por hechos en cualquier operación del sector bancario, pero sobre todo en un banco del nivel de Citibank.

¿Se equivocaron entonces también las calificadoras que otorgaron los grados de inversión para las emisiones de bonos de la empresa cuya principal línea de negocio ha sido ser contratista de Pemex? ¿Se equivocó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores al autorizar esas emisiones? La respuesta sencilla es que, precisamente, se constituyó un fraude al presentarse como auténticos documentos que harían parecer a Oceanografía, que preside Amado Yáñez, como una empresa financieramente sana.

Entonces, Banamex-Citibank denuncia; deslinda responsabilidades entre los directivos de nivel medio que participaron en las autorizaciones y castiga los créditos involucrados que, en este caso, superan los dos mil 880 millones de pesos, unos 253 millones de dólares. Oceanografía, es cierto, se mantenía como contratista de Pemex hasta el 2016. ¿Era suficiente ese dato para liberar créditos a esta compañía con dudosos antecedentes, al menos desde 2004?

En 2014 se presenta, además, una muy mala noticia para cualquier banquero: Oceanografía fue inhabilitada por 21 meses y 12 días porque las fianzas no cubrían los montos mínimos requeridos para cada uno de los contratos. Entonces el fraude se consumó y hasta aquí el prestigio bancario queda a salvo porque Banamex también creyó en los documentos autorizados por Pemex, pero que se basaron en documentos falsos.

¿En qué medida este banco evaluó los riesgos asociados a Oceanografía y su controversial desempeño público desde el gobierno de Felipe Calderón? Desde 2004, quienes conocen por dentro a la empresa le advirtieron a Yáñez -ligado con la familia Bibriesca Sahagún- que sus finanzas no iban nada bien. Ya para entonces se registraba un quebranto, nos aseguran. El monto no lo revelan. Sin embargo, la continuidad de sus contratos con Pemex les permitió seguir adelante aunque no con la misma dimensión que en la época foxista. La alerta se encendió cuando Yáñez compró tres equipos de futbol. ¿Qué tenía que ver el futbol con Pemex? ¿Estaba pensando Yáñez cambiar de core business al fragor de los cambios en las telecomunicaciones?

También la venta de Oceanografía -que ofreció servicios de barcos a Pemex- estaba sobre la mesa porque Yáñez sabía que con sus antecedentes foxistas difícilmente podría seguir haciendo negocios con la paraestatal.

Lo que es un hecho es que la defensa de Yáñez tendrá que ser de primer nivel o muy influyente políticamente porque la empresa ya fue asegurada por el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE). Ya se giró la orden de presentación contra Yáñez, quien hasta hace unos meses declaraba a los periodistas que estaba listo para llegar a los proyectos de aguas profundas que se venían en Pemex, que tenía los barcos y los recursos. ¡Vaya!

 

MÁS INFORMACIÓN: Por presunto fraude a Banamex, Citi ajusta a la baja resultados de 2013, nota de Arena Pública de febrero 28 de 2014.