Concursos mercantiles, un derecho en crisis

Desde el año 2000, cuando se crea el Instituto Federal de Concursos Mercantiles (Ifecom) y también desde la promulgación de la ley en la materia, en México sólo se acumulan 519 casos vinculados con demandas de empresas o bancos para buscar reestructuras de deuda al amparo del Poder Judicial.
28 Enero, 2014 Actualizado el 28 de Enero, a las 09:42
Las cláusulas Vitro y Mexicana en la nueva Ley de Concursos Mercantiles son claras.
Las cláusulas Vitro y Mexicana en la nueva Ley de Concursos Mercantiles son claras.
Arena Pública

La cifra, en una economía como la mexicana, resulta preocupante. Ha sido sólo un centenar de compañías, incluyendo a los grandes corporativos regiomontanos, las que han confiado la resolución de algún problema de insolvencia a esta legislación y al instituto que dirige la abogada Griselda Nieblas. Durante la gestión anterior de Manuel Méjan, el número promedio de casos al mes que se llegó a registrar sumó más de 40. Ahora, la cifra –de acuerdo con cifras a junio de 2013– no llega a los 14 casos. En Estados Unidos y Canadá, mientras tanto, un número similar de juicios se presenta pero en todo un mes.

Esa es la dimensión de la crisis de confianza que se tiene en esta legislación pero sobre todo en el derecho procesal y en la corrupción de los tribunales.

Sin embargo, la Ley de Concursos Mercantiles, paradójicamente, se convirtió en un tema central de la reforma financiera, de las modificaciones al complejo paquete de cambios legislativos que propuso la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que encabeza Luis Videgaray. Quienes participaron en las pocas reuniones de consultados con entidades, como la Barra Mexicana de Abogados, confirman que varios de los cambios que se aplicaron a esta legislación se pensaron con dedicatoria a dos casos que llegaron a esferas diplomáticas: los concursos mercantiles de Vitro -que ahora dirige Adrián Sada Cueva- y Mexicana de Aviación, en donde la capitalización de pasivos de la compañía que administra las operaciones del MRO, su base de mantenimiento, sigue en vilo ante la ausencia de acuerdos con los trabajadores.

Las cláusulas Vitro y Mexicana son claras. Ahora, previo acuerdo del acreedor y del deudor, será posible cambiar al especialista en procesos concursales designado por el Ifecom. Así, se podrá optar por alguno de la lista de los especialistas del instituto o buscar uno externo. Una mala noticia para Griselda Nieblas porque ese cambio revelaría la escasa confianza que ha generado ese instituto. A partir del caso Vitro, además, se modificaron disposiciones respecto a los acreedores relacionados en empresas filiales, un aspecto que se convirtió en el gran dolor de cabeza de los bancos y tenedores de bonos extranjeros de la empresa regiomontana.

En el concurso mercantil del Grupo Industrial Durango también se presentó el mismo problema y hoy las modificaciones a la Ley de Concursos Mercantiles tienen el sello de la banca para evitar largos procesos en perjuicio de los acreedores.

 

MÁS INFORMACIÓN: Bancos tendrán sus propias reglas en Ley de Concurso Mercantil, nota de Arena Pública de enero 24 de 2014.