La mutación de las remesas, ¿por las nuevas reglas financieras?
Al final el saldo global, de acuerdo con el Congreso de Estados Unidos, arroja 7.5 millones de fuentes de trabajos perdidas en la economía formal mientras en la eventual, que recibe la mano de obra de origen latino, también se restringieron las contrataciones. Por ello, para los migrantes en ese país, originarios de México y Centroamérica, la permanencia en una economía con lento crecimiento se ha complicado.
Para muchos analistas el estancamiento en las remesas que recibe la economía mexicana es una clara señal de estos fenómenos. A noviembre pasado, según el Banco de México, el incremento de las remesas sólo fue de 0.09 por ciento con un saldo de 1,694 millones de dólares y un monto total de 19,801 millones de dólares, también hasta el onceavo mes del año.
Las estimaciones indican que la caída acumulada sería entre 5.5% y 4.5%, respecto a 2012. Lo relevante es que México parece estar sólo en esta tendencia pues en otros países de Centroamérica las remesas siguen aumentando.
La respuesta a esta situación podría encontrarse en el avance del sector de las telecomunicaciones y en las nuevas reglas del sector bancario porque los más de 11 millones de mexicanos que viven en Estados Unidos siguen generando ingresos. Es cierto, 96.7% de los envíos a México se realizaron a través de money orders, transferencias y hasta en depósitos en efectivo.
¿Y el resto? ¿Y el crecimiento anual promedio que hasta ahora se presentaba? Expertos en el sector de las telecomunicaciones estiman que el pago de servicios en este sector estaría concentrando el incremento adicional que ya no se refleja en las cuentas tradicionales y totales del envío y recepción de remesas. En el mismo caso, se encontraría el pago de parcialidades en créditos vía tarjeta de crédito, hipotecarios y otros servicios financieros.
La clave del cambio en el registro de remesas se ubicaría en la obligatoriedad de tener registradas cuentas en México para realizar pagos en servicios bancarios desde Estados Unidos.
Hasta hace un año era posible usar medios de pago domiciliados en aquel país para liquidar, por ejemplo, mensualidades de tarjeta de crédito; sin embargo con las nuevas medidas para prevenir el lavado de dinero, las reglas han enfatizado la importancia de que las cuentas bancarias que reciben dinero del extranjero sean inspeccionadas por autoridades mexicanas.
En el Banco de México, cuya Junta de Gobierno encabeza Agustín Carstens, ya analizan este fenómeno y los cambios en el registro de remesas.
A FONDO: Lea aquí los números más recientes sobre ingresos por remesas del Banco de México.
