Los pagos chiquitos de Elektra fracasan en Argentina

<p>Ante la embajada del gobierno mexicano en Argentina los representantes de los trabajadores de Elektra Argentina se presentaron ayer por la ma&ntilde;ana para buscar una audiencia con funcionarios mexicanos.</p>
3 Octubre, 2013 Actualizado el 3 de Octubre, a las 09:54
Arena Pública

Su queja ante el gobierno de Enrique Peña Nieto fue el incumplimiento en el que habría incurrido Ricardo Benjamín Salinas Pliego al anunciar intempestivamente su salida de ese país ante los problemas económicos, inflacionarios, pero sobre todo frente al control de cambios y salida de capitales ordenados por Cristina Fernández, presidenta de Argentina.

La respuesta de la representación diplomática que encabeza Fernando Castro Trenti sorprendió a los colaboradores de Elektra: “El gobierno mexicano simplemente no podía intervenir en el conflicto porque Elektra Argentina es una compañía constituida en ese país”. Una respuesta más allá de la nacionalidad de los accionistas. Legalmente, Elektra Argentina se constituyó como una compañía local.

Desconsolados los trabajadores que buscan la liquidación de adeudos por salarios y fondos de pensiones, aseguran que ya no tienen contacto con los representantes de Salinas Pliego en ese país y que resulta un misterio el cierre de las operaciones de la compañía mexicana.

Con siete años de operación en Argentina, Elektra buscó adaptar su exitoso esquema de negocios de venta de electrodomésticos con “pagos chiquitos para pagar poquito” a la estructura de consumo de las clases populares de aquel país. El problema fue que los pagos semanales que en México han permitido a Elektra reducir riesgos de cartera vencida, en Argentina fueron prácticamente una batalla perdida.

¿La razón? El pago de salarios en Sudamérica se realiza de manera mensual y la planeación de los gastos familiares responde a otra cultura. Elektra se enfrentó a lo impensable en Argentina: los pagos chiquitos no funcionan como sucede en México y hasta en otros países de la región.

Tampoco logró engarzar la operación del Banco Azteca y, durante los últimos tres años, Salinas Pliego y su equipo intentaron arrancar la operación de una empresa financiera vinculada con los créditos al consumo. En cambio, en algunos países de Centroamérica Banco Azteca se convirtió en la punta de lanza de sus operaciones, dejando a un lado la venta de electrodomésticos a través de esquemas de financiamiento.

La principal queja de Salinas Pliego respecto a su operación en Argentina sería la imposibilidad de manejar libremente sus cuentas en dólares ante la crisis cambiaria que enfrenta ese país. En un comunicado, Grupo Elektra también aseguró que sus operaciones estaban en problemas ante las restricciones a la importación de productos.

No obstante, los trabajadores de la empresa aseguran que la proveeduría de electrodomésticos era local y que Elektra no enfrentaba tal restricción. ¿Dónde están las verdaderas razones de la decisión de abandonar Argentina?

 

MÁS INFORMACIÓN: Protestan trabajadores argentinos de Elektra por cierre de filial, nota de Arena Pública de octubre 2 de 2013.