¿Qué se necesita para ser un buen Fiscal?

Moralizar y profesionalizar lo que será la nueva Fiscalía General, será el mejor referente para la actuación futura del gobierno
31 Octubre, 2016

1.- Saber Derecho. Es increíble, pero a esa posición han llegado personas desprovistas de conocimientos en derecho penal, tanto sustantivo como adjetivo. Hoy más que nunca, requerimos Fiscales conocedores del proceso penal acusatorio. En teoría, debieran hacer lo que hace un agente del Ministerio Público. Saber hacer las cosas impone autoridad ante los subordinados, amén de que permite conocer directamente los asuntos, con criterio propio, para que no le cuenten. El perfil que hoy se exige de un Fiscal, es el de un auténtico abogado litigante acusador.

2.- Honestidad. Es uno de los valores más importantes de la persona. Se ejerce siendo congruente entre lo que se piensa, se dice y se hace.

3.- Valor. En no pocas ocasiones se requieren decisiones valientes. Un Fiscal miedoso siempre cometerá errores al interior de su estructura. Además, para ejercer plenamente la autonomía de su Fiscalía, se requiere valor para enfrentar los poderes  fácticos.

4.- Profunda percepción social y política, que no significa ser político. Es decir, hablamos de un Fiscal astuto con el colmillo suficiente. Hay asuntos que siendo pleitos políticos, terminan siendo litigios penales. Un Fiscal astuto no se engancha, le puede salir caro a la institución que representa. Por otra parte, hay asuntos que debiendo ser estrictamente judiciales, por un mal manejo en las investigaciones, se convierten en temas políticos (Ayotzinapa).

Con las señales provenientes del Senado, y tomando en cuenta los tiempos, todo indica que el nombramiento del Doctor Raúl Cervantes Andrade como Procurador General de la República, se traducirá en su designación como el primer Fiscal General de la República.

Carlos Loret de Mola preguntaba en su noticiero del 26 de octubre pasado, ¿qué sería lo primero que el nuevo Procurador tendría que hacer al llegar? Me parece que el mismo Procurador ya dio respuesta a esa pregunta, en su mensaje ante el pleno del Senado el día anterior.

Dijo que se pueden recrear las instituciones, con un diagnóstico real de las necesidades que serán resueltas en el tiempo, y en ese sentido aclaró que no hay soluciones mágicas a los problemas. Posteriormente, ratificó lo dicho al comparecer en Comisiones. Lo que leo en su discurso, tomando en cuenta su perfil, y con toda mi fe depositada en su persona, creo que el señor tomará las siguientes medidas:

1.- Recrear la institución. Efectivamente, la PGR está devastada, esa fue la mejor verdad de Murillo Karam. Es falso que la institución seguirá avanzando bajo este nuevo liderazgo, cuando en realidad tiene años hundida en el abandono. Creo que con honestidad y valor emprenderá la empresa mas importante de su vida, titánica pero no imposible.

2.-Diagnóstico Real de las Necesidades. Me gustó, pues no hacerlo y no gritarlo a los cuatro vientos, significaría convertirse en cómplice, como lo han sido quienes al llegar ocultan lo que encuentran ahí, al ser políticamente inconveniente denunciarlo. Con el análisis se dejará al descubierto la ineficiencia y corrupción acumulada a lo largo de los años en la institución.

Hecho el diagnóstico y por lo que ha expresado al referirse al SAT, implementará un “modelo de negocios” a fin de que la organización redefina su propósito central y que es procurar justicia. Que en base al modelo genere un mapa estratégico que no tiene; alinee procesos internos de operación; cree infraestructura moderna y eficiente; profesionalice, etc. Para logarlo, necesitará rodearse de profesionistas de amplia experiencia en distintas disciplinas. La organización está plagada de recomendados y amigos, menos los que se requieren.

Siendo el litigio una actividad que ha desempeñado profesionalmente pues sabe Derecho, seguramente identificará en su estructura la importancia del Ministerio Público. Son ellos la columna vertebral que le da vida a la organización. Deberá devolverles la dignidad y libertad perdidas para investigar, sin injerencias. Necesitan salarios, horarios y espacios dignos, que sin ellos, son terriblemente susceptibles de corrupción.

Un tema que los políticos evitan es el presupuestal. Se resignan sumisamente a los designios que vienen del presupuesto de egresos. Sin dinero no se puede hacer nada. Si en verdad se quiere una Fiscalía a la altura de lo que se demanda, deberá gozar de un presupuesto suficiente para cumplirlas. Es tan grave el problema, que los edificios que ocupan áreas Centrales de la PGR en Ciudad de México, están infestados de plagas como ratas y cucarachas.

El edificio de Insurgentes y Colima está afectado por el temblor de 1985 y, a pesar de ello, está sobrecargado con un peso vivo de casi un millar de personas, sin contar los enormes archivos que suman toneladas. El lugar es una bomba de tiempo. Los litigantes en ocasiones, tardan casi una hora en acceder por la falta de elevadores. Ejemplos sobran, falta de papel que los propios interesados aportan para imprimir diligencias, o viáticos que pagan de su bolsa los Ministerios Públicos para acudir a diligencias judiciales. A ese grado están las cosas.

3.- Resolver las necesidades sin esperar soluciones mágicas. Como todo empresa de gran calado, con disciplina y paciencia, los resultados sólo se verán a largo plazo. Tiene razón el Procurador cuando dice que no podemos esperar resultados inmediatos. Pero mientras tanto y eso lo digo yo, ¿qué hacer con los asuntos que se encuentran en trámite?

Habrá que ser cuidadosos y no juzgar la actuación del nuevo Procurador en función de ellos. Sin duda, tratará de resolverlos de la mejor manera, pero cualquier abogado sabe que enderezar un asunto es más difícil que iniciarlo.

Las críticas a su designación me parecen infundadas por dos razones. En primer lugar, porque traer una persona sin vínculo alguno a grupos políticos, empresariales o profesionales es imposible. Necesitaríamos a un monje tibetano sacado de su monasterio. La segunda es que con su llegada, dicen se estaría empedrando el camino para dejar en la impunidad los delitos cometidos por funcionarios de ésta administración. Es falso.

¿Que acaso no tenemos ya un Sistema Nacional Anticorrupción donde existen otros actores a través de su Comité Coordinador, y donde destacan las figuras del Secretario de la Función Pública y el Fiscal Anticorrupción? ¿Entonces? Las miradas y críticas no son por este lado.

Moralizar y profesionalizar lo que será la nueva Fiscalía General, será el mejor referente para la actuación futura del gobierno. No lo conozco ni tengo vínculos con el señor, pero por el bien del país y como abogado, le deseo mucho éxito en su gestión que, a la larga, será la única que lo juzgue.

 

@borozco16

Benjamín Orozco Manjarrez Benjamín Orozco Manjarrez Abogado especialista en Delitos Fiscales y Financieros. Fue Titular de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Fiscales y Financieros de la Procuraduría General de la República, anteriormente como responsable del área penal del SAT. Abogado postulante (socio fundador) de DDE, defensa de delitos económicos.