Las benditas redes como contrapeso

Las últimas dos semanas hemos visto cómo se han venido dando respuestas colectivas organizadas en las redes sociales en reacción a muchas propuestas, ideas y mensajes de Andrés Manuel López Obrador.

Todos estos casos se los hemos venido relatando aquí en Arena Pública. El surgiemiento de una nueva oposición desde lo espontáneo.

En el sexenio que termina, las redes sociales y concretamente Twitter fueron un contrapeso importante para articular movimientos de protesta, generar nuevos cuadros que ahora ocupan lugares importantes en la vida pública del país. Tendieron puentes entre grupos que nunca se habrían unido. Sin olvidar que desde su candidatura el movimiento #YoSoy132 y sus derivaciones con el tiempo fueron su marcaje personal.

Andrés Manuel López Obrador ha sido beneficiado por el apoyo articulado en las redes, su victoria aplastante no podría explicarse sin la base social organizada en parte en internet. 

Pero como hemos visto estas últimas dos semanas, las redes también se han organizado en su contra para recordarle que las benditas redes sociales no son incondicionales. Muchas de esas voces hablan del arrepentimiento de haber votado por él. Y son voces importantes.

La reacción de Enrique Peña Nieto para lidiar con ellas fue la tecnocensura, ejércitos de bots, espionaje masivo, redes de acoso a periodistas y activistas. Y ello se fue generalizando en los estados con los gobernadores. 

A pesar de ello, los movimientos en red resistieron y siguen estando presentes. Y un fenómeno importantes es que de aparentes diferencias, muchosde ellos gracias a las redes están encontrando coincidencias como la creciente oposición a cómo se realizará la consulta sobre el Tren Maya. 

¿Veremos que todo el apoyo volcado a López Obrador se vuelva en su principal fiscalizador? ¿Caerán en la tentación de crear troll centers y ejercitos de bots? ¿Cuál será la respuesta de este gobierno que comienza en unos días? ¿Seguirá con el enorme apoyo de las redes?

El sexenio de Peña Nieto desde el primer minuto tuvo un movimiento en contra como lo fue el #1DMX. Andrés Manuel sin entrar a gobernar ya ha generado protestas en las redes y en las calles. Veremos qué pasa en la toma de posesión.

El respeto irrestricto a la libertad de expresión y aceptar a la gente movilizada, articulada y organizada en redes como un contrapeso permanente, es vital para consolidar la democracia.

Que el próximo gobierno una vez en funciones aprenda a escuchar a las miles de personas que se organizan para dar a conocer su voz. Que no haga como Calderon y Peña que intentaron silenciarlas.

Porque viendo cómo han reaccionado los últimos días, las benditas redes sociales solo son fieles al bien común.