Campesinos desplazados y abandono de tierras, el otro viacrucis por la violencia

Al perder sus medios de vida muchos están cayendo en la pobreza y en la informalidad.
14 Junio, 2017 Actualizado el 15 de Junio, a las 08:08
Una cuarta parte de los ejidatarios mexicanos tuvieron problemas con la inseguridad durante 2014.
Una cuarta parte de los ejidatarios mexicanos tuvieron problemas con la inseguridad durante 2014.
Arena Pública

La llamada “guerra contra el narcotráfico” también afectó al campo, sólo que a 11 años de declarada no se sabe en qué medida.

El desconocido número de campesinos desplazados por la violencia e inseguridad es sólo un ejemplo.

Ellos se suman la falta de información sobre las cifras de personas desplazadas por estas causa que en México oscilan entre las 150,000 y 1.6 millones de personas.

Lo que se sabe sobre la vida después de la huida de los campesinos y ejidatarios son pequeños fragmentos de historias, pistas para reunir, reconstruir y conocer la magnitud de un problema no muy claro, la cantidad de tierras cultivadas en la última década es una de ellas.

Hasta 2007 el campo mexicano no había registrado un sólo retroceso en la cantidad de hectáreas cultivadas durante 30 años.

No obstante, en siete años se perdieron 475,000 hectáreas de superficie, equivalente a 67,000 campos de futbol al año, de acuerdo con el último registro tomado de 2014 de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés).

Estas fechas coinciden con el sexenio de Felipe Calderón y el comienzo de la guerra contra el narcotráfico a finales de 2006, así como con los dos primeros años del actual presidente Enrique Peña Nieto, tiempo en el que la violencia se incrementó en niveles letales para la población y en el que se observaron migraciones internas de personas imposibles de contabilizar hasta la fecha.

 

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La inseguridad fue uno de los problemas que se agregaron a la lista de dificultades para la producción agropecuaria de acuerdo con la última Encuesta Nacional Agropecuaria hecha en 2014 por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

En ella 1 de cada 4 encuestados afirmó haber tenido que lidiar con la inseguridad en ese año agrícola, es decir, una cuarta parte del total.

Los casos de denuncia acerca del abandono de las tierras por inseguridad corroboran la encuesta.

El 30% de la población rural de Tamaulipas dejó atrás sus tierras para migrar a espacios más seguros en 2012, aseguró la dirigente estatal de la Central Campesina Independiente, Rosario López.

Aquellos que habitaban los municipios alrededor de Ciudad Victoria, la capital, fueron los que más se desplazaron, reportó el periódico Reforma.

Pero el desplazamiento no es la única consecuencia que dejó el crimen organizado entre los campesinos, también perdieron sus tierras por la explotación que estas sufrieron.

 

Los Caballeros Templarios impusieron el monocultivo de aguacate en la comunidad de Cherato, Michoacán. 

 

El oro verde también fue codiciado por los cárteles, especialmente por Los caballeros templarios en Michoacán, que después de dominar la región entre 2008 y 2013, impusieron el monocultivo de aguacate en las tierras, produciendo con el tiempo tierras secas e infértiles, imposibles de utilizarse para otros cultivos, declaró un campesino de la comunidad de Cherato, municipio de Los Reyes, Michoacán al portal Animal Político.  

Una vez desplazados su seguridad no mejora, al contrario genera obstáculos para el ejercicio de salud, vivienda, alimentación, trabajo y más. Un ejemplo de ello son los campesinos chiapanecos que tuvieron que migrar tras la ocupación del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en 1994.

La estimación en número de afectados por el EZLN también es inexacta, pues va de 9,000 a más de 28,000 personas, en el ámbito laboral muchos de ellos se incorporaron al trabajo informal y poco remunerado, su única opción ya que únicamente conocen la producción agrícola como medio de sustento, informó el Centro de Monitoreo de Desplazamiento Interno del Consejo Noruego para Refugiados en 2011.  

En el ámbito económico se ha asumido que los desplazados se ganan la vida a sí mismos o son dependientes de sus familiares, sin embargo, durante la Caravana por la Paz que se llevó a cabo en 2011, desplazados internos informaron que perdieron sus medios de vida, muchos basados en la producción agrícola y que estaban cayendo en la pobreza, aseguró el mencionado Centro de Monitoreo.

 

MÁS INFORMACIÓN:  Desplazamiento debido a violencia criminal y comunal en México,  Centro de Monitoreo de Desplazamiento Interno, 2011. 

MÁS INFORMACIÓN: Encuesta nacional agropecuaria, INEGI, 2014. 

MÁS INFORMACIÓN: Datos agrícolas de México, FAO. 

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