Un anuncio lo dice todo: Inflación, comisiones e impuestos minaron el ahorro de millones en 2015
Las bajas tasas de interés han castigado a los ahorradores en 2015.
Y es que a pesar de una inflación históricamente baja en el año, los depósitos de los ahorradores en las instituciones bancarias han registrado pérdidas en términos reales, una vez descontadas, además, las comisiones y tarifas que cobran los bancos.
Y ello, sin cuantificar los impuestos que aplica el gobierno a los ahorros lo que agrava las pérdidas para los ahorradores.
El viernes 25 de diciembre se publicó un anuncio en un diario de circulación nacional que ilustra esta situación.
El Banco Multiva pregonaba, a plana completa en el diario, el anuncio con este titular: “Esta temporada tu felicidad crece. Invierte en nuestro Pagaré Navideño y obtén una tasa preferencial de 3.20%”.
El anuncio con motivos y regalos navideños ilustraba la parte superior de la plana, ofreciendo, aparentemente, una buena oportunidad para cualquier ahorrador.
Sin embargo en la parte baja de la plana del diario, el propio anuncio publicitario deja ver la realidad cuando aclara: “Tasa bruta anualizada a plazo de 180 días. Sujeta a cambios sin previo aviso. Monto mínimo de inversión $10,000 pesos. GAT nominal 3.23% antes de impuestos, GAT real -0.48% antes de impuestos”.
Y líneas abajo explica al potencial ahorrador que el GAT es la Ganancia Anual Total Nominal, y el GAT Real es la Ganancia Anual Total Real, es decir, el rendimiento que se obtendría después de descontar la inflación estimada.
El propio anuncio publicitario del Banco Multiva deja en claro que si un ahorrador deposita su dinero en un pagaré a 180 días de plazo, su ganancia real será negativa en 0.48% una vez descontados inflación y comisiones; y sin tomar en cuenta aún la retención correspondiente a los impuestos.
En pocas palabras, el ahorrador –seis meses después, habrá perdido dinero al ahorrar en el banco.
Pero no es solo el caso de Multiva, es el caso de la gran mayoría de los más de 40 bancos que operan en el país en el que los ahorradores mexicanos, en octubre pasado, tenían depositados 3.6 billones de pesos (unos 200 mil millones de dólares) en instrumentos a plazo –como los pagarés- y de exigibilidad inmediata –como las diversas cuentas de ahorro.
El asunto es que millones de pequeños ahorradores no tuvieron opciones viables para conservar su patrimonio financiero y defenderse de la inflación, de los impuestos y de las comisiones bancarias. Como dirían los economistas, la destrucción del ahorro familiar estuvo a la orden del día en 2015.
