Imposible, adquirir casa para 46% de mexicanos de acuerdo al BID

El BID propone el alquiler de viviendas como una solución “alternativa eficiente y efectiva ” para resolver el déficit habitacional que afecta al 40% de los hogares en América Latina y el Caribe por la inaccesibilidad de la vivienda por sus altos costos.
14 Abril, 2014 Actualizado el 14 de Abril, a las 15:28
Una cuarta parte de las viviendas adquiridas a través de instituciones públicas en 2009 se encuentran desocupadas.
Una cuarta parte de las viviendas adquiridas a través de instituciones públicas en 2009 se encuentran desocupadas.
Arena Pública

La población más pobre del país -que según el último reporte del Coneval, representa al 46% del total- tiene serias dificultades para adquirir una vivienda nueva porque tendría que invertir del 50% al 100% de sus ingresos, según un reporte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) titulado Se busca vivienda en alquiler.

De acuerdo con el BID, las familias en pobreza extrema -con ingresos mensuales promedio de 767 pesos mensuales- simplemente no podrían cubrir el pago mensual de un crédito para adquirir una vivienda formal básica estándar, esto es, una casa de 40 metros cuadrados con un precio aproximado de 195 mil pesos (15 mil dólares), una cuota inicial de 10% y un crédito a 20 años con una tasa de interés del 6%.

Mientras que las familias pobres con ingresos promedio de 2,000 y 3,300 pesos mensuales tendrían que asignar el 80% y el 50 % de sus ingresos al crédito de vivienda estándar, respectivamente.

Lo anterior, no obstante que México y Chile son los dos países de América Latina y el Caribe que más han avanzado en solucionar la inaccesibilidad a la vivienda por los altos costos, de acuerdo al organismo internacional, que en promedio para los países de esta región representa un gasto de su población por arriba de la tercera parte de su ingreso.

En contraposición al bajo poder adquisitivo de la vivienda entre las familias más pobres del país, en México el ritmo de crecimiento de la vivienda ha sido mayor que el de la población, pues tan sólo en el 2009 se otorgaron cerca de 900 mil créditos, la mayoría destinados a la compra de vivienda nueva, mientras que la formación de nuevos hogares fue de alrededor de 600 mil. Esto, debido a la proliferación de créditos concedidos por el Fovissste e Infonavit.

El BID resaltó que un considerable número de las nuevas casas se construyen en las periferias de las ciudades y “en algunos casos de mala calidad”, razón por la cual una cuarta parte de las viviendas adquiridas a través de dichas instituciones públicas se encuentran desocupadas.

“La tendencia a concentrar a los más pobres en las periferias tiene efectos perversos en su desarrollo humano... afecta su acceso a la educación, seguridad e información”, destacó el informe.

 

A FONDO: Lea aquí el informe comple del BID.