Moda para personas con discapacidad, un nuevo nicho de mercado

Las personas con discapacidad tienen la necesidad de vestir a la moda sin que eso sea incómodo y las marcas comienza a atender esta necesidad.
20 Septiembre, 2018 Actualizado el 30 de Septiembre, a las 17:20
Las personas con discapacidad necesitan ropa que se acople a sus necesidades y además los haga ver bien. (Foto: pixabay.com)
Las personas discapacidad necesitan ropa que se acople a sus necesidades y además los haga ver bien. (Foto: pixabay.com)
Arena Pública

Todas las personas deberían tener acceso a vestir prendas que las hagan sentir a gusto consigo mismas, sin embargo eso no sucedía para quienes cuentan con algún tipo de discapacidad física.

Apenas en esta década los diseñadores voltearon a ver a las personas con discapacidades como un nicho de mercado. Para esta población vestir a la moda es complicado porque la estructura de su cuerpo no les permite usarlas o bien porque el uso de algún aparato para moverse se los dificulta.

La gente con otras necesidades privilegia la comodidad sobre su identidad por falta de opciones. En la ropa, forma y función deben conjugarse para que no tenga que resignarse entre elegir uno u otra.

En México existen 2 millones 437 mil personas con discapacidad tipo motriz, 1 millón 292 mil con discapacidad visual y 498.6 mil que no pueden escuchar, de acuerdo con el último Censo de Población y Vivienda realizado por Inegi en 2010.

 

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La moda inclusiva es importante porque propaga la idea de que está bien sentirse cómodo; derrumba el estigma que hay alrededor de las personas con discapacidad y reconoce la necesidad de este población por usar ropa en tendencia y bien confeccionada.

A pesar de esto, la industria ignoró a las personas con discapacidad por siglos. Y las prendas que llegaban a hacer para ellos se dedicaban a cubrir, ocultar y minimizar cuerpos que no pertenecían al ojo público, de acuerdo con un artículo de The Guardian

 

Tommy Adaptative es la colección de Tommy Hilfiger con costura adaptativa a otros requerimentos. (Foto: Tommy Hilfiger).

 

El cambio se ha dado paulatiavamente. Open Style Lab es el ejemplo de la indumentaria que se puede hacer cuando se piensa en perfiles diferentes. Esta organización sin fines de lucro que opera en Estados Unidos, tiene la misión de hacer diseños funcionales y de moda para personas con otras necesidades.

Grace Jun, directora ejecutiva de Open Style Lab, dijo para New York Times que el diseño inclusivo es un proceso de colaboración entre quien diseña y quien lo va usar.

Otro ejemplo es la colección primavera-verano 2018 de Tommy Hilfiger. Está pensada para personas con fisonomía que requiere otras funciones en la ropa. Por eso tienen cierres de velcro, costuras amplias, cinturas ajustables, cremalleras para usar con una sola mano y botones magnéticos.

Dos años antes, la empresa ya había colaborado con “Runway of Dreams”, asociación sin fines de lucro que trabajar porque la moda incluyente, sobre todo para los niños.

La inclusión poco a poco se convierte en un valor para las marcas. Es el caso de la inglesa Labels Are For Clothes, que sacó al mercado diseños para discapacitados.

 

 

En México, Annett Castro es fundadora y promotora de Moda Incluyente, un desfile de moda que por cinco años ha visto desfilar a modelos con discapacidad. También promueve la inclusión laboral para estas personas.

En 2014 se formó el colectivo 3D Graphic que reúne a diseñadores para crear colecciones enfocadas a este nicho de mercado que apenas voltearon a ver.

 

 

MÁS INFORMACIÓN: Diseñando para todas las habilidades, New York Times, 9 de mayo de 2017.

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