Crece 200% parque vehicular en CDMX y EDOMEX en 15 años

En la Ciudad de México el parque vehicular creció poco más del doble en 15 años, a esto hay que añadir que en el Estado de México el incremento fue cercano al 400%.
21 Julio, 2017 Actualizado el 21 de Julio, a las 10:20
Los gobiernos enfrentan la paradoja de tener que desarrollar transporte público y mantener las vialidades.
Los gobiernos enfrentan la paradoja de tener que desarrollar transporte público y mantener las vialidades.
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Sin freno y a toda velocidad. Así ha sido el crecimiento del parque vehicular en el país, pues el número de automóviles particulares creció mucho más rápido que la población.

Al iniciar el siglo, en el 2000, México tenía 97 millones de habitantes y 9.78 millones de vehículos particulares; 15 años después, la población alcanzó los 119.5 millones de habitantes y el número de autos llegó a 26.52 millones.

Dicho de otra manera, mientras que el número de habitantes aumentó 23%, el número de vehículos particulares creció en 171%, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

Pero hay más. El estudio Panorama Global de Peatones y Ciclistas de la ONU estimó que para el 2030 podría haber casi 70 millones de autos circulando en el país.

 

 

Durante muchos años, el crecimiento de casi todas ciudades del país ha sido desordenado y las opciones de vivienda accesible se encuentran cada vez más alejadas de los lugares de trabajo, lo que obliga a las autoridades a enfrentar mayores demandas de infraestructura y servicios, tales como vialidades y transporte, que permitan la movilidad de las personas.

“En el caso de las ciudades mexicanas, la respuesta a esas demandas ha sido la creciente motorización y la intensidad en el uso del automóvil particular, impulsadas por la inversión en infraestructura vial para el transporte motorizado por parte de los gobiernos federal, estatales y de la Ciudad de México”, establece el Reporte Nacional de Movilidad Urbana en México elaborado por ONU-Hábitat.

 

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El documento indica que este tipo de políticas públicas tienden a aumentar el parque vehicular privado y a fomentar el uso intensivo e irracional del automóvil.

“En 2012, el índice de motorización llegó a 300 vehículos por cada mil habitantes, es decir, casi el doble con respecto a los 160 que había en el año 2000. Este parque atiende las necesidades de desplazamiento de personas y bienes en un entorno marcado por la falta de control y prioridades en materia de circulación”, sentencia el organismo internacional.

 

La Ciudad de México fue catalogada como la que tiene más tráfico en el mundo, en un estudio reciente.

 

El tráfico vehicular ya no es privativo solo de la Ciudad de México, otras zonas metropolitanas alrededor del mundo ya experimentan congestión vial, altos costos de movilidad, pérdidas de tiempo en traslados, invasión de espacios públicos, accidentes, contaminación, inseguridad y rechazo al transporte público por lento y peligroso.

 

Las entidades con más autos

En la Ciudad de México el número de vehículos particulares aumentó 114.61% al pasar de 2.21 millones de autos registrados en el 2000 a casi 4.76 millones en 2015. A esta cifra hay que añadir que en el Estado de México el número de autos privados pasó de casi 900 mil en el 2000 a 4.48 millones en 2015, es decir un aumento de casi 400%.

Además de la Ciudad de México y el Estado de México las otras tres entidades con la mayor cantidad de vehículos particulares son Jalisco, Nuevo León y Veracruz y el incremento en el número de este tipo de autos fue de 162%, 117% y 186%, respectivamente.

 

 

Otras entidades de menor tamaño como Aguascalientes, Chiapas, Durango, Colima, Guanajuato, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Quintana Roo, Sinaloa, Tabasco y Tlaxcala vieron un aumento superior al 200% en el número de vehículos particulares en lo que va del siglo.

 

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“Un sistema basado en incentivos al transporte motorizado privado genera una situación paradójica en el país, pues la mayor parte de los recursos que se destinan al transporte son invertidos en obras como pasos a desnivel, puentes y distribuidores viales, es decir, una infraestructura enfocada a agilizar y optimizar el movimiento de automóviles, cuando en promedio más de un 65% de los viajes se realizan en transporte público”, alerta la ONU.

 

¿Dónde se usa más el auto?

En muchos sentidos, la concentración de autos que vive la Ciudad de México supera la de cualquier entidad del país. No sólo tiene el mayor número de vehículos, sino que, al dividir el número de habitantes entre el número de vehículo da un promedio de 1.87 habitantes por auto.

Ninguna otra entidad está cerca de esta cifra. En Baja California Sur hay 2.5 habitantes por cada vehículo privado; en Chihuahua, 3.46, y en el Estado de México 3.61. En cambio, en Oaxaca hay 19.29 habitantes por vehículo; en Chiapas, 14.16, y en Zacatecas, 8.18.

 

 

En la encuesta intercensal 2015 del Inegi, se incluyó una variable para medir el medio de transporte que usa la gente. 17.51% de los estudiantes y 27.67 de los trabajadores llegaban a su escuela o lugar de labores en vehículo particular.

Casi la mitad de quienes laboran de Baja California Sur (47.80%) llegaban en auto particular a su lugar de trabajo. Le siguen Baja California (47.67%), Chihuahua (44.97%), Sonora (44.58%) y Sinaloa (38.76%).

 

En ciudades como Monterrey, Guadalajara, Puebla, Tijuana y Querétaro ya son comunes los congestionamientos viales.

 

En contraste, únicamente 12.91% de los chiapanecos llegaron a su trabajo en auto, es la entidad con el menor porcentaje, seguido de Guerrero (13.26%), Oaxaca (13.71%) y Tlaxcala (16.67%).

Aunque comúnmente se considera como indicador de desarrollo económico que una parte de la población tenga vehículo particular, a mayor cantidad de autos en las calles, más problemas de movilidad, especialmente si su uso es irracional.

 

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“En las ciudades europeas, aunque presentan elevadas tasas de motorización, el uso del automóvil particular es más racional, debido a que los costos de mantenimiento son elevados, no hay subsidios en la gasolina, tienen restricciones de carriles y horarios, y la expedición de licencias es costosa y rigurosa; pero, sobre todo, por la existencia de sistemas de transporte público eficiente, accesible, seguro y con amplia cobertura” concluye el estudio de ONU-Hábitat.

 

MÁS INFORMACIÓN: Encuesta intercensal 2015, Instituto Nacional de Estadística y Geografía, 2016.

MÁS INFORMACIÓN: Reporte Nacional de Movilidad Urbana en México, ONU-Habitat, 2016.

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