Economistas lo confirman: ofertas del Buen Fin son irreales

La primera de las investigaciones académicas llevadas a cabo en México sobre el Buen Fin descubrió que los precios disminuyen, pero porque días antes del evento aumentan hasta 3%.
22 Mayo, 2017 Actualizado el 22 de Mayo, a las 19:02
El Buen Fin puede no traer beneficios reales para las familias mexicanas, es la conclusión del estudio.
El Buen Fin puede no traer beneficios reales para las familias mexicanas, es la conclusión del estudio.
Arena Pública

El Buen Fin sí reduce los precios.

Pero porque días antes los establecimientos los suben.

Los precios parecen disminuidos porque hay un aumento antes y después de la semana del evento, de acuerdo con el artículo ¿Realmente bajan los precios durante el Buen Fin?, publicado por la revista El Trimestre Económico, del Fondo de Cultura Económica para abril-junio de 2017.  

Si bien el estudio dice que los precios han bajado en promedio 7% desde que inició el Buen Fin en 2011, también afirma que paulatinamente, en los días anteriores al evento, los precios se elevaron de entre 0.3 y 2.5% para 2011-2013 y de entre 1 y 3% para 2014-2015.

El Buen Fin puede no traer beneficios reales para las familias mexicanas, es la conclusión del estudio elaborado por el economista de la Universidad de California, Berkeley, Raymundo Campos y Eduardo Medina, del Colegio de México.  

Los resultados de la medición arrojan que desde antes de que se iniciara con la práctica de bajar los precios en la tercera semana de noviembre, los comercios ya tendían a disminuir los precios.

 

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En 2010 se tenían rebajas de precios en la última semana de noviembre y diciembre de entre 1.5 y 2.5%, respectivamente, de acuerdo con el estudio. Sin embargo, para el periodo de 2014-2015 ese promedio se redujo a cero.

Esto significa que a partir de que se instauraron las ofertas del Buen Fin los comercios dejaron de hacer rebajas en el periodo posterior y de hecho han aumentado sus precios esas semanas.

El estudio afirma también que  la reducción del precio ha sido mayor desde 2011, mientras que en ese año fue de 3%, en 2014-2015 fue de 8%.

Aunque los investigadores aclaran que la reducción de precios se ve empañada por la reducción de costos que ya existía antes del evento -y que desapareció con el Buen Fin- y por el aumento de precios que sucede días antes. 

Algunas de las ofertas no son tan reales como se anuncian. 

Lo anterior se resume de la siguiente forma: si hay un electrodoméstico que cuesta 100 pesos, este incrementa su precio en los días anteriores al Buen Fin a 103 pesos. En los días que dura el evento, bajan el precio a 95 pesos, así el ahorro real es de cinco pesos y no los ocho promocionados.

En 2015, Arena Pública llevó a cabo una investigación al respecto. Descubrió que algunos productos señalados como “ofertas” conservaron su precio pero entraron a promociones de “meses sin intereses”. Por otra parte, hubo productos que incluso aumentaron su precio durante esa emisión del evento.

 

Inspirados en el Black Friday

El Buen Fin es una iniciativa del Gobierno mexicano y el Consejo Coordinador Empresarial promovida desde 2011 e inspirada en el Black Friday, un evento en Estados Unidos donde se ponen productos en ofertas para beneficiar al consumidor.

Pero en México las leyes que regulan las ofertas son más laxas que en Estados Unidos. Al otro lado de la frontera estudios han demostrado que las ofertas fueron reales y en promedio de 30% durante 2016, de acuerdo con Profitero, una investigadora de comercio electrónico.

En México en 2013, más de la mitad de las ofertas fueron menores a 10% y la tercera parte de los productos ofertados no registró descuentos, de acuerdo con información de Nielsen, una consultora especializada en el comportamiento del consumo global.

 

Hay una tendencia creciente de movilidad en los precios, sin embargo, también ha crecido la tendencia a subirlos días antes del Buen Fin. 

Fuente: El Trimestre Económico. 

En México la Ley Federal del Consumidor señala que si la oferta no se cumple, el ciudadano podrá rescindir el contrato y tendrá derecho al pago de la diferencia entre el precio ofertado y el real. Es decir, además del resarcimiento al daño no hay más castigo para el comerciante por incumplir la ley.

 

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Por otra parte, la ley estadounidense y la Comisión Federal de Comercio (Federal Trade Commission, FTC) en el país del norte permiten que un consumidor recupere sus pérdidas pero también que pueda demandar por penalidades adicionales.

Además, muchas de esas demandas por daños requieren que el demandado pague el abogado del demandante, por lo que los castigos a infringir la ley de ofertas son más graves.

En México el problema es que los precios aumentan antes del Buen Fin; en Estados Unidos que grandes compañías como Walmart sí ofrecen precios más bajos, pero en productos que mandan hacer -de menor calidad- específicamente para vender en Black Friday, de acuerdo con una investigación de NerdWallet de 2014, una herramienta que ofrece comparaciones de descuentos y tasas de interés.

A pesar de todo ello, la importancia del Buen Fin va en aumento. En 2015 el total de ventas de los cuatro días del evento fue de 80,000 millones, comparado con los 18,000 millones que recaudó en su primera emisión de acuerdo con el Trimestre Económico, lo cual significa que se cuadruplicaron.

 

MÁS INFORMACIÓN: ¿Realmente bajan los precios durante el Buen Fin?, El Trimestre Económico, 2017.  

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