Dormir con la luz encendida podría acelerar el envejecimiento

Un nuevo estudio médico sugiere que esta práctica también puede acarrear otros problemas de salud.
15 Agosto, 2016 Actualizado el 16 de Agosto, a las 18:27
No dormir con la luz apagada, podría ser la causa de algunos de los problemas para tener un sueño reparador.
No dormir con la luz apagada, podría ser la causa de algunos de los problemas para tener un sueño reparador.
Arena Pública

La exposición excesiva a la luz artificial podría afectar tus horas de sueño.

Para algunas personas, el dormir en cualquier circunstancia no es ningún problema. Sin embargo, conciliar el sueño con las luces encendidas tal vez no es la mejor idea para tu reloj biológico. 

Un nuevo estudio, realizado en ratones de laboratorio por la Universidad de Leiden, reveló que el exceso de exposición a la luz artificial podría acelerar el envejecimiento y ocasionar varios problemas de salud. 

Los problemas van desde lo más sencillo como falta de sueño, hasta situaciones más delicadas como el aumento de riesgo de cáncer de mama. Sin embargo la relación entre la luz y las enfermedades no está comprobada al cien por ciento.

Actualmente más del 80% de la población mundial se encuentra expuesta a la contaminación lumínica (aumento del brillo del cielo nocturno), por lo que varios estudios paralelos han hecho alusión a los posibles efectos negativos de la luz artificial.

 

¡Luces encendidas!

Un grupo de investigadores de la Universidad de Leiden, ubicada en los Países Bajos, expuso a 100 ratones a la luz artificial durante 24 horas en un periodo de 24 semanas. Al mismo tiempo, un grupo de control con las mismas características fue sometido a periodos normales de día/noche.

Los animales tenían la posibilidad de dormir en el lugar que quisieran, pero esto no los alejaría de la luz; incluso al cerrar los ojos la luminosidad solo se reduciría en una séptima parte, pero no la eliminaría. Los ratones tenían conectados electrodos en sus cerebros con el fin de medir las células neuronales.

Al finalizar el experimento, los investigadores encontraron que los relojes biológicos de los ratones expuestos a constante luz se habían desplazado desde el ciclo normal de 24 horas a 25.5 horas. Esto significa que en lugar de sentir sueño a la misma hora, éste se retrasaría 1.5 horas más. 

Esta desincronización es un fenómeno que los científicos han observado como una parte típica del envejecimiento, tanto en roedores como en seres humanos.

Además, después de 24 semanas sin parar de luz artificial, los sujetos de prueba sufrieron otros signos además del envejecimiento, por ejemplo: densidad ósea disminuida y músculos debilitados.

A pesar de los resultados, los investigadores no están completamente seguros sobre la relación entre la desincronización del reloj biológico y la luz artificial, ya que podría tratarse de otros factores como la falta de sueño en 24 semanas.

En comparación, 24 semanas de la vida en un roedor equivale a una sexta parte de su vida, por lo que las condiciones a las que fueron expuestos son extremas y señalan un impacto gigantesco en su ciclo de vida, por lo que la situación difícilmente se podrá replicar en humanos. 

Aunque las condiciones entre seres varíe, sigue siendo recomendable mantener un ambiente obscuro en el momento de dormir, pues está comprobado que resulta en un sueño más agradable y reparador.

 

MÁS INFORMACIÓN: Ciclos ambientales de 24 hrs son esenciales para la salud - Current Biology

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