Durante 2014 México se acercó más que nunca a ser importador petrolero

La balanza comercial petrolera arrojó un superávit de apenas 1,500 millones de dólares.
27 Enero, 2015 Actualizado el 28 de Enero, a las 18:42
El superávit comercial petrolero de 2014 es el más bajo en los registros históricos del INEGI, los cuales se remontan hasta 1993.
El superávit comercial petrolero de 2014 es el más bajo en los registros históricos del INEGI, los cuales se remontan hasta 1993.
Arena Pública

México está a 1,526.2 millones de dólares de convertirse en un importador neto de productos petroleros.

De acuerdo a datos de la balanza comercial mexicana del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), durante 2014 las importaciones petroleras ascendieron a 41 mil 484.5 millones de dólares; mientras tanto, las exportaciones petroleras se colocaron en 43 mil 9.7 millones.

La diferencia entre estos arroja un superávit comercial de apenas 1,500 millones de dólares.

Esto se debe a un progresivo aumento de las importaciones y por la caída de los últimos tres años en las exportaciones petroleras derivada del declive productivo del complejo petrolero Cantarell y últimamente por los castigados precios del barril de crudo en los mercados internacionales.

Del 2013 al 2014 las importaciones petroleras mexicanas crecieron 1.6%, mientras que las exportaciones decrecieron 13.1%. Esta caída es la más grande en los últimos cinco años.

El superávit comercial petrolero de 2014 es el más bajo en los registros históricos del INEGI, los cuales se remontan hasta 1993. El nivel que más se le acerca  es el de 1998, cuando el superávit fue de apenas 3 mil 54.2 millones de dólares.

En el caso hipotético de que el ritmo de crecimiento de importaciones y de reducción de las exportaciones mexicanas vistos en 2014 se mantenga este 2015, la balanza comercial petrolera, hoy superavitaria, llegaría a un déficit de 4 mil 785.2 millones de dólares.

Los números aportados por el INEGI respaldan al discurso oficial en torno a la justificación de la Reforma Energética. Funcionarios como el director general de Pemex, Emlio Lozoya, o el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, han asegurado en el último año que sin cambios profundos al esquema energético en el país éste se convertirá en un importador neto de productos petroleros.

El capítulo más reciente de esta situación son las declaraciones hechas el pasado 21 de enero del titular de Pemex, quien expresó que la empresa productiva del estado se encuentra lista para importar desde Estados Unidos hasta 100 mil barriles de crudos ligeros y condensados. Esto, con el fin de incrementar la producción de gasolina y diésel.

Al mismo tiempo, México le vendería crudo pesado a las refinerías estadounidenses, según el trato, cuya aprobación aún está pendiente de luz verde por parte de la administración de Barack Obama.

Según el gobierno federal, la Reforma permitirá dar marcha atrás a la tendencia gracias al aprovechamiento de los recursos no convencionales como el shale gas y el shale oil y de aguas profundas mediante la inversión empresarial nacional y extranjera, y la transferencia tecnológica para Pemex.

Como informó Arena Pública el pasado 19 de enero, la caída libre en los petroprecios en los mercados internacionales amenaza el interés por el 95% de los yacimientos licitados en la Ronda Uno.

Expertos han asegurado, y autoridades reconocido, que la depreciación petrolera de más del 50% en el barril de petróleo desde mediados del 2014 reduce el apetito por la explotación de yacimientos de difícil acceso.

Se prevé que al menos en este 2015 no se generen barriles adicionales producto directamente de la apertura energética en México.

 

 

MÁS INFORMACIÓN: Petroprecios amenazan interés en 95% de yacimientos de Ronda Uno. Nota de Arena Pública del 19 de enero de 2015.